Plan de riesgo


 Plan de riesgo

Continuamos con nuestra serie del mes Plan B, esta serie tiene el propósito de ayudarnos a tener una visión sobre lo que debemos hacer cuando nuestro mundo es sacudido. Muchas veces tenemos nuestra vida organizada, equilibrada, y relajada, pero suceden cosas fuera de nuestro control que vienen a alterar nuestra condición. Así que con motivo del 10 de mayo el día de hoy hablaremos sobre una mujer que elaboró un plan extraordinario para salvar a su hijo.

En la biblia muchas mujeres sobresalen por sus historias, pero creo que alguien que no ha recibido el mérito debido ha sido la madre de Moisés Jocabed. Su presencia en la biblia es mínima, pero sin duda fue efectiva por los resultados obtenidos. Como todos sabemos cuándo Moisés iba a nacer se dio un decreto para que no se permitiera el nacimiento de los niños varones en Israel.

Jocabed no solo fue muy brillante sino además era una mamá que haría hasta lo imposible por salvar a su hijo. Como dicen por ahí el amor de una madre es el combustible que logra imposibles.

Veamos el plan de una madre que no se da por vencida.

Plan visionario

para salvar un plan más grande

En esos días, un hombre y una mujer de la tribu de Leví se casaron. La mujer quedó embarazada y dio a luz un hijo. Al ver que era un niño excepcional, lo escondió durante tres meses.  Éxodo 2.1-2

Primeramente, debemos notar que Jocabed vio un futuro muy grande en su hijo, se dice que todas las mamás ven bonitos a sus bebés, pero Jocabed vio más que belleza en su hijo. Jocabed fue una madre visionaria, no era solo una sugestión causada por la maternidad, o el sexto sentido de una madre ella vio más que eso. El mismo Esteban en su discurso lo describe como hermoso para Dios.

Fue por ese tiempo que Moisés nació. Era hermoso a la vista de Dios, y fue criado por tres meses en la casa de su padre. Hechos 7.20 LBLA

Creo que en este punto caemos en el mismo discurso, todas las madres ven a sus hijos como especiales para Dios, pero debemos dejar a un lado nuestras emociones y concentrarnos en las realidades, un hijo puede traer un plan de Dios, pero la madre en este caso es clave para que esto puede lograrse, si el plan de Dios por sí mismo funciona ¿para qué invertimos tiempo en nuestros hijos? ¿para qué María tiene que huir con Jesús a Egipto para protegerlo? Dios pone planes especiales en aquellos cuyas madres son visionarias y claves para impulsar a sus hijos al éxito. Con esto no pretendemos descartar a nadie del propósito de Dios sino inspirar a las mujeres a una dedicación especial en el futuro de sus hijos.

Es importante que como madre observes a tus hijos con ojos proféticos, en el caso de Moisés era muy pequeño para manifestar habilidades es por eso que Jocabed tuvo una visión extraordinaria sobre él, pero en otros casos los hijos están mostrando habilidades que se nos están escapando de la vista. Para esto debemos ser observadores objetivos, identificar que es una habilidad y que es algo muy normal en los niños, también identificar que es algo de su interés y que es algo que hemos inducido por nuestros propios gustos. Pues aunque puedan ser hábiles en algunas cosas realmente no las disfrutan como nosotros lo imaginamos, pues corremos el peligro de proyectarnos en ellos para que sean lo que nosotros nunca fuimos, así que debemos aprender a dirigirlos en el propio camino que van trazando, debemos notar que es lo que se les facilita y tomar nota, pero aún no determinar sino seguir observando, ver que le apasiona, invertir, un hijo puede tener una habilidad que jamás se desarrollará porque la trabajará con sus recursos porque como padres a veces no vemos la necesidad de invertir, en esto también debemos tener cuidado porque por querer verlo destacar muchos padres los hacen estar en todo y a les dificultan encontrar un camino en lugar de ayudarlos, finalmente nunca compares pues cada hijo es único e irrepetible.

Plan bien pensado

 Cuando ya no pudo ocultarlo más, tomó una canasta de juncos de papiro y la recubrió con brea y resina para hacerla resistente al agua. Después puso al niño en la canasta y la acomodó entre los juncos, a la orilla del río Nilo. 4 La hermana del bebé se mantuvo a cierta distancia para ver qué le pasaría al niño.  Éxodo 2.3-4 NTV

La madre de Moisés no solo fue una mujer visionaria, diseñó uno de los planes más estratégico que podamos encontrar en la biblia, esta mujer era brillante. Podríamos pensar que simplemente ya no pudo seguir cuidando del bebé Moisés y decidió dejarlo a su suerte, pero analizando bien Jocabed pudo haber pensado en cada detalle que sería la única oportunidad para salvar a Moisés.

Vemos los detalles:

Colocó a Moisés en una arquilla, la cual la biblia dice que calafateó con asfalto y brea, esto no lo hizo en el momento pues requería de un tiempo de secado para que se volviera a prueba de agua, así que mientras armaba la arquilla tenía en mente un plan.

Buscó el lugar indicado.  Sabemos que el Nilo tenia cocodrilos, pero, es claro que al Moisés estar al alcance de la princesa de Egipto estaba en las mismas aguas, por lo que se cree que estaba en una zona segura donde posiblemente se cercaba para evitar el paso a cocodrilos.

Además, la arquilla no fue puesta para que anduviera a la deriva sino donde pareciera que había llegado por la corriente.

La persona adecuada. También tuvo que pensar en la persona que encontraría a Moisés, porque pudo haber terminado en manos de algún otro hebreo con quien correría la misma suerte, o en manos de un egipcio que no dudaría en cumplir la orden del faraón, así que tenía que arriesgarse por lo más alto, por alguien que podría sin duda no cumplir la orden del rey, y no había otra persona mejor que la hija del faraón.

6 Al abrir la canasta la princesa vio al bebé. El niño lloraba, y ella sintió lástima por él. «Seguramente es un niño hebreo», dijo. Éxodo 2.6 NTV

El plan estaba yendo a la perfección, la arquilla no se hundía, estaba en un lugar seguro, bajo la observación de María, y finalmente había hecho contacto., ahora sola faltaba esperar la reacción de la hija del Faraón, afortunadamente en el momento que hizo contacto visual se enamoró del bebé, la biblia describe muy bien ese momento en el que la princesa se conmovió.

Estratégicamente María ofreció una nodriza que se hiciera cargo del niño, eso era para que la princesa no pensara en ningún inconveniente que le impidiera quedarse con el niño.

 Entonces la hermana del bebé se acercó a la princesa. —¿Quiere que vaya a buscar a una mujer hebrea para que le amamante al bebé? —le preguntó. 8 —¡Sí, consigue a una! —contestó la princesa. Entonces la muchacha fue y llamó a la madre del bebé.

Las palabras de María sin duda también fueron precisas algunos le dan una edad de alrededor de diez y otros de siete años, es posible que también esas palabras especificas le hayan sido dadas por su madre, debemos destacar la expresión para que le amamante al bebé, como asegurando que ya es suyo.

 El tiempo oportuno

John Maxwell dice: Cuando usted es capaz de discernir una oportunidad dorada y tomar la iniciativa de aprovecharla en el momento oportuno, el éxito es casi inevitable.

No solo debemos ver el lugar indicado y la persona adecuada sino encontrar el momento oportuno. La madre de Moisés vio todos esos detalles y el resultado fue un éxito.

Aquí cabe hacernos las preguntas ¿están mis hijos en los lugares indicados, con las personas correctas aprovechando los momentos oportunos? ¿Qué tanto podemos ver esto en nuestras vidas? Debemos recordar que cuando caminamos en Dios no existen las casualidades, así que debemos abrir bien los ojos porque la oportunidad puede estar pasando justamente delante de nosotros.

Un plan de fe.

«Toma a este niño y dale el pecho por mí—le dijo la princesa a la madre del niño—. Te pagaré por tu ayuda». Así que la mujer se fue con el bebé a su casa y lo amamantó. 10 Años más tarde, cuando el niño creció, ella se lo devolvió a la hija del faraón, quien lo adoptó como su propio hijo y lo llamó Moisés,[a] pues explicó: «Lo saqué del agua». Éxodo 2. 9-10 NTV

Sin duda todo esto fue un verdadero plan arriesgado de parte de Jocabed, pero un sinónimo que le podemos a dar al riesgo en la biblia es la fe. Es por esto que esta parte de la historia de Moisés figura en hebreos 11.

Jocabed pudo haber evitado estar en esta crisis, pudo haberse quedado con su parejita de hijos, a veces queremos vivir una vida sin riesgos haciendo lo tradicional y convencional y dejamos que Dios obre, pero si deseamos crecer o lograr algo en la vida no será de esta forma. Tenemos que desmentir esta idea de dejarlo todo en las manos de Dios, los grandes hombres de Dios actuaron en fe, y obtuvieron resultados por sus decisiones y acciones, Dios obra en el momento que nosotros damos pasos de fe. una madre no deja a sus hijos a la ventura, una madre trabaja en un plan pensado y detallado para que sus hijos sean favorecidos por Dios para alcanzar el éxito

No hay comentarios:

coméntanos si te ha sido de utilidad esta publicación,