Plan de reinicio.
Durante estos días hemos estado hablando sobre la serie “plan b” en la que hemos aprendido sobre qué medidas debemos tomar cuando las circunstancias le dan un giro a nuestra vida, por supuesto no siempre tenemos que cambiar algo, a veces solamente tenemos que continuar con lo que estamos haciendo como un barco que navega hacia una dirección y se encuentra en medio de una tormenta, debemos continuar con el mismo plan hasta superar las circunstancias, pero en otras ocasiones sí nos vemos obligados a cambiar estilos de vida, relaciones, lugares etc., a fin de poder encontrar la estabilidad y no perder el propósito de Dios en nuestras vidas, como cuando nos encontramos en una carretera bloqueada, y nos vemos obligados a hacer cambios por lo que tenemos que tomar otras rutas alternativas que tal vez no sean cómodas o fáciles pero lo hacemos con el fin de llegar al lugar deseado.
Sin embargo, a hay ocasiones en
las que nuestro error es perder el propósito la meta principal y decidimos
salirnos del plan A, por lo que ahora nuestro plan B está causando muchos
estragos y mientras no seamos capaces de verlo estaremos estancados sin poder
ver avances en nuestras vidas, por lo que no tenemos que llevar a cabo un plan B
sino un plan de regreso.
En muchas situaciones de nuestra
vida diaria aprendemos que cuando algo no está funcionando solo necesitamos
reiniciar, no hay mediadas extraordinarias, soluciones complejas, simplemente
un reinicio.
Este es el caso del hijo Prodigo
de quien la mayoría sabemos que decidió dejar la casa de su padre para “vivir
su vida” sin embargo las cosas no sucedieron como las imaginó porque muy seguramente
no las planeó, pues terminó por consumir la herencia de su padre y deseando
comer alimento para cerdos. Así que en su nueva condición entonces tuvo un
tiempo para reflexionar como reparar todo el desastre cometido, y la única respuesta
fue un plan de reinicio.
Veamos qué puntos claves necesitamos
tomar quienes no necesitamos seguir avanzando contra la tormenta, quienes no
necesitamos un plan alterno sino más bien un plan de reinicio, porque, aunque
un reinicio parezca simple también necesita ser planeado.
Me levantaré e iré a mi padre, y
le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Lucas 15.18
RECONOCE Y DETERMINA.
Me levantaré… Lucas 15.18
La biblia dice que este joven volvió en sí, es
interesante esta expresión porque es como si hubiera estado desmayado o inconsciente
de las cosas que estaba haciendo, y creo que a muchos nos ha sucedido que en algún
momento no nos damos cuenta de lo que estamos haciendo hasta que ya vimos el
efecto. Es como andar sonámbulo, a veces necesitamos hacer altos en nuestra
vida para evaluar nuestra ubicación.
Así que el primer paso es
reconocer, esta es la parte más difícil en el reinicio para muchas personas, el
problema es luchar contra nosotros mismos, porque nuestro yo se niega a aceptar
su error, el problema es que mantener nuestra postura nos da control y
satisfacción, así que no es buena opción perderla, las personas que no se
disculpan o piden perdón tienen una estima alta porque creen mantener el
control. Como nos gusta tener el control y el poder, reconocer nuestros errores
nos hace otorgarles poder a los que no rodean cosa que no estamos dispuestos a
dar.
“Si es evidente para todos que
has cometido un error, ser obstinado le muestra a la gente una debilidad de
carácter, en vez de una fortaleza”. Tyler Okimoto
Por eso la clave del hijo prodigo
fue volver en sí, porque precisamente nuestra mente intentara todo lo posible
para que nos sintamos bien con nuestras decisiones, y lo que debemos hacer es
despertar y dejar de conservar una postura que no nos ayuda justificando todo
lo que hacemos mal. Una vez que ya entendiste tu error y lograste reconocerlo ya
tienes un pie dentro del proceso de transformación.
Además, también notamos la
determinación de este joven al declarar me levantare, uno de mis versículos favoritos
de la biblia es Job 22.28
Determinarás asimismo una cosa, y
te será firme, Y sobre tus caminos resplandecerá luz. Job 22.28
La determinación nos ayuda a no
seguir perdiendo el tiempo necesitamos tomar el retorno inmediatamente, no
podemos seguir avanzando en la misma dirección que ya sabemos no nos está
favoreciendo. La determinación es más fácil cuando ya hemos reconocido, porque
cuando no lo hemos hecho, nuestra seguiremos buscando opciones alternas que
solo nos agobiaran. Determinar nos da enfoque y el enfoque nos ayuda a dirigir
correctamente nuestros recursos sin desperdiciarlos.
la biblia dice que eso nos dará
luz, ¿quieres claridad sobre lo que vas a hacer? Determina, ¿quieres dejar de
luchar con dos opciones? Determina, la respuesta a muchos sentimientos que nos
quieren agobiar muchas veces es la determinación.
Además de reconocer y determinar
debemos recordar lo poderosa que es nuestra palabra, lo que confieses es lo que
seguramente harás, no solamente lo pensó, ¡lo dijo! Necesitas decir lo que has
determinado, eso te compromete, porque si el problema es nuestro orgullo que no
le gusta reconocer que está equivocado, seguramente no le gustará la idea de
decir me levantaré y después no hacerlo. Nuestro “yo” nos obligará a cumplir lo
que dijimos que haríamos, pues no le gustará la idea de equivocarse otra vez. hay
una fuerte conexión entre el hablar y el creer de corazón, pues es así como la oración
de fe es efectiva. Debes confesar que necesitas hacer cambios y debes creer para
que eso te conduzca a la acción.
ENCUENTRA EL PUNTO DE
RESTAURACIÓN.
…Iré a mi padre… Lucas 15.18
No se mucho, pero en la
computadora hay algo que se llama punto de restauración estos sirven para
cuando hacemos cambios en el equipo y terminan afectándolo, así que al
reiniciar el equipo puede volver al punto de restauración donde todo funcionaba
bien. Si queremos hacer un reinicio tenemos que pensar ¿en dónde estábamos haciendo
las cosas bien? Y tenemos que volver allí, como en la ciencia ficción cuando
alguien tiene que viajar al pasado para reparar un error que le ha traído consecuencias
en el futuro.
El hijo prodigo analizó y
encontró su punto de restauración cuando dijo iré a mi padre, es decir no a sus
amigos, no a los lugares que visitó en su desobediencia, sino al punto donde
estaba bien, donde comía bien, donde dormía bien, donde todo era seguro y
estable aunque no perfecto, debemos entender esto porque tal vez el único punto
en el que estábamos bien a nuestro criterio fue cuando éramos niños pequeños y “no
teníamos problemas” debemos encontrar el punto donde comenzamos a caer, donde
comenzamos a perder en lugar de ganar, donde no era todo perfecto pero estábamos
en un buen momento.
Cuando la iglesia de Éfeso perdió
su primer amor Dios les llamó a recuperarlo pensando en el punto de restauración.
Por lo cual ten memoria de dónde
has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; si no, vendré presto a ti,
y quitaré tu candelero de su lugar, si no te enmendares. Apoc. 2.5 JBS
¡recuerda! ¿Dónde estabas en un
buen punto de tu vida?
Cuando Jesús liberó al gadareno
lo envió a su punto de restauración.
pero Jesús, en vez de
permitírselo, le dijo: «Vete a tu casa, con tu familia, y cuéntales las grandes
cosas que el Señor ha hecho contigo. Cuéntales cómo ha tenido misericordia de
ti.» Marcos 5.19 RVC
Es increíble Jesús no le
permitiera seguirle, hubiera sido un gran testimonio, pero este hombre no solo tenía
que ser restaurado, sino restaurar a todos los que había afectado con su antiguo
estado.
Y podríamos hablar de otros
ejemplos en los que Dios lleva a sus hijos a su punto de restauración como
cuando Pedro volvió a través de una fogata al momento en el que traicionó a Jesús.
A esto se le llama en palabras más claras ARREPENTIMIENTO.
Es dar el giro de 180° cuando
vuelvas a tu punto de restauración habrás mostrado arrepentimiento, nuevo
nacimiento y listo para comenzar enmendar tus errores.
CAMBIA TUS FALSAS CREENCIAS.
…Y le diré Padre, he pecado
contra el cielo y contra ti. Lucas 15.18
Sin embargo, reconocer nuestros
errores y regresar al punto estable no es suficiente si nuevamente hacemos lo
mismo, porque como en muchos casos tendremos una especie de efecto recaída, así
que un nuevo inicio no significa que ya todo será perfecto, pues los hábitos
siguen siendo los mismos. Para esto algo importante es cambiar nuestras falsas
creencias, porque son las que nos volverán a poner en la misma condición de
antes. Alguien que se endeuda y logra pagar, volverá a caer nuevamente a menos
que cambien su forma de hacer las cosas, alguien que hace dieta para adelgazar
volverá a engordar a menos que cambien su estilo de vida, alguien que se casa
de nuevo volverá a tener crisis a menos que cambie su carácter, y así podríamos
encontrar muchos ejemplos en la vida diaria.
Pensemos por un momento que hizo
que el joven ya no quisiera estar en la casa del padre, sus pensamientos le
hicieron creer que no lo necesitaba que podía lograr tener éxito sin él, que
fuera de la casa del padre todo sería mejor, es por eso que tiene que cambiar
su visión acerca de su padre, por lo que dice he pecado contra el cielo y
contra ti. Cambia su posición de ser el hijo arrogante que lo merece todo a esperar
en la bondad de su padre y ponerse a su servicio como un jornalero. este joven
puede comenzar de nuevo porque piensa diferente sobre la casa, sobre su padre,
e incluso sobre los jornaleros.
¿Cuáles son tus creencias sobre
lo que deseas cambiar? Es importante que
te hagas las preguntas necesarias para poder reiniciar correctamente, necesitas
pensar que medidas tomarás para no recaer, que cambios harás, pero evaluar si
son duraderos y sinceros.
Si tomamos estas medidas, reconocimiento,
determinación, encontrar el punto de restauración y cambiar nuestras falsas
creencias, crearemos la atmosfera correcta para que las bendiciones se desaten
sobre nuestra vida. El prodigo fue buscando cobre y encontró oro, quería vivir
como jornalero, pero retomó su lugar de hijo, Dios favorece nuestras vidas
cuando hacemos y tomamos las decisiones correctas.
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