En días pasados hemos
estado hablando acerca de cómo algunos hombres en Biblia lograron mantener un
espíritu de adoración en medio de los momentos difíciles, la actitud en todos
ellos fue clave para enfrentar la adversidad. En este tema mencionaremos otras razones por las que podemos adorar a Dios en un tiempo adverso.
Desde que comenzamos la serie
el primer personaje que a muchos les vino a la mente y compartieron en sus
grupos, fue el apóstol Pablo, todos tenemos presente como en medio de la
prisión cantaba con Silas y Dios los
liberó. Pero ¿Cuál es el secreto de Pablo?
Dice la Biblia: También la
gente comenzó a atacar a Pablo y a Silas. Los jueces ordenaron que les quitaran
la ropa y los golpearan en la espalda. 23 Después
de golpearlos bastante, los soldados los metieron en la cárcel y le ordenaron
al carcelero que los vigilara muy bien.24 El carcelero
los puso en la parte más escondida de la prisión, y les sujetó los pies con
unas piezas de madera grandes y pesadas. Hechos 16.22-24
Pablo y Silas no solamente terminaron en la
cárcel, sino que habían sido lastimados con varas BASTANTE, lo que significa que
no se sabe la cantidad, de golpes que recibieron, fueron tratados con crueldad, también fueron puestos en
la parte de máxima seguridad, como si fueran peligrosos, además los pusieron en
el cepo, lo que hacía de la cárcel no solo un mal lugar sino un tiempo doloroso
para ellos, a pesar de esto ellos cantaron.
Cerca de la media noche, Pablo y Silas oraban y
cantaban alabanzas a Dios, mientras los otros prisioneros escuchaban. Hechos
16.25
¿Cómo
podían cantar en medio de tan incómoda realidad? El cristiano promedio se
siente derrotado y abandonado por Dios cuando es criticado por otras personas,
imagínese a Pablo no eran simples críticas contra él, le levantaron falsos, los
golpearon y encarcelaron todo injustamente, pues Pablo aclara que eran ciudadanos
romanos y debieron haber sido tratados así.
Pero Pablo les dijo a los guardias:
«Nosotros somos ciudadanos romanos. Los jueces ordenaron que nos
golpearan delante de toda la gente de la ciudad, y nos pusieron en la cárcel,
sin averiguar primero si éramos culpables o inocentes. ¿Y ahora quieren
dejarnos ir sin que digamos nada, y sin que nadie se dé cuenta? ¡Pues no! No
nos iremos; ¡que vengan ellos mismos a sacarnos!» Los guardias fueron y les
contaron todo eso a los jueces. Al oír los jueces que Pablo y Silas eran
ciudadanos romanos, se asustaron mucho.39 Entonces
fueron a disculparse con ellos, los sacaron de la cárcel y les pidieron que
salieran de la ciudad. (V.37-38)
A veces
como cristianos se nos olvida que no estamos exentos de pasar por situaciones difíciles
y cuando estas suceden perdemos la cabeza.
Queridos hermanos en Cristo, no se sorprendan si
tienen que afrontar problemas que pongan a prueba su confianza en Dios. Eso no
es nada extraño. 1 Pedro 4.12
Pedro dice
que la adversidad ni debe sorprendernos ni nos debe parecer algo extraño.
veamos las razones por las que podemos adorar y alabar a Dios en la adversidad.
PUEDES ADORAR
EN LA ADVERSIDAD CUANDO VES EL PLAN DE DIOS DETRÁS ELLA.
Cuando
estamos pasando por dificultades nos cegamos y no podemos ver nada positivo
detrás de tanta oscuridad.
Cuando
Pablo estuvo en Filipos había sido por parte de plan de Dios, una visión les
había indicado que debían pasar a Macedonia (Hechos 16.9) Filipos era una de
las principales ciudades de aquel lugar, así que Pablo sabía que estaba allí
con un propósito, y él sabía que la cárcel también era parte del plan. Aquel
día no solamente se salvó el carcelero sino además la familia, y por otro lado
los presos que escuchaban. Mientras estaba sus pies estaban inmovilizados Pablo
utilizo lo que aún le funcionaba su voz, no cualquiera puede tener el valor
para alabar en un momento como ese a menos que sepa algo que los demás no
logran entender, Pablo sabía que Dios tenía un propósito para su vida, y la
cárcel era temporal.
Además,
mis amados hermanos, quiero que sepan que todo lo que me ha sucedido en este
lugar ha servido para difundir la Buena Noticia. Filipenses 1.12 NTV
Pues cada persona
de aquí —incluida toda la guardia del palacio— sabe que estoy encadenado por
causa de Cristo; Fil. 1.13
Cuando reflexionas en esto y
comienzas a ver más allá de los barrotes comprendes que Dios tiene un plan
mucho más grande, y que todo lo que te sucede aun lo difícil Dios lo utilizará
para bien.
PUEDES
ADORAR EN LA ADVERSIDAD CUANDO ENCUENTRAS FORTALEZAS QUE TE SOSTIENEN.
Pero
eso no importa; sean falsas o genuinas sus intenciones, el mensaje acerca de
Cristo se predica de todas maneras, de modo que me gozo. Y seguiré gozándome19 porque
sé que la oración de ustedes y la ayuda del Espíritu de Jesucristo darán como
resultado mi libertad. Filipenses 1.18-19
La primer fortaleza que te sostiene es lo que sabes.
Pablo dice: “porque se…” es lo que sabemos lo que nos ayudará en el tiempo
difícil, no lo que no sabemos, es lo que sabe lo que le ayudará a un estudiante
en un examen, no lo que no sabe. Cuando el rey Josafat tenía la amenaza de
guerra dijo: “no sabemos que hacer” 2 Crónicas 20.12, así que lo único que
sabía era clamar a Dios. En los momentos difíciles nos invadirán muchas
preguntas que no tendrán respuesta, y que solamente nos atormentaran, ¿Por qué
sucedió?; ¿Qué hice mal? Etc., pero no es lo que no sabemos lo que nos ayudará sino
lo que si sabemos.
La segunda fortaleza que te sostiene es la
oración de otros. La oración de los creyentes es clave en
nuestras vidas, todos necesitamos orar, pero también necesitamos la oración de
otros.
“La oración
ferviente de una persona justa tiene mucho poder y da resultados maravillosos.
Santiago 5.16b”
Por eso es importante pertenecer a una
familia/iglesia, porque sabemos que podemos contar con las oraciones de ellos.
la oración de la iglesia liberó a Pedro de la cárcel.
Pero, mientras Pedro estaba en la cárcel, la iglesia oraba
fervientemente por él. Hechos 12.5
Son incontables las victorias que tenemos por la
oración que la iglesia hace por nosotros.
La tercer fortaleza que te sostiene es el
Espíritu de Dios.
Además, el
Espíritu Santo nos ayuda en nuestra debilidad. Por ejemplo, nosotros no sabemos
qué quiere Dios que le pidamos en oración, pero el Espíritu Santo ora por
nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras. Romanos 8.26
Pablo dice que como humanos somos débiles, y necesitamos
la ayuda del Espíritu, no se espera que el Espíritu lo haga todo, como algunos
pretenden, sino que Él nos ayude en lo que ya sabemos que debemos hacer. Pablo nos da un ejemplo tan sencillo como es orar “no
sabemos” basta con ir a un servicio de oración para comprobarlo, pero si
dejáramos al Espíritu interceder por nosotros las cosas realmente cambiarían.
PUEDES ADORAR
EN LA ADVERSIDAD CUANDO TU VIDA TIENE PROPÓSITO.
Estoy dividido entre
dos deseos: quisiera partir y estar con Cristo, lo cual sería mucho mejor para
mí; pero por el bien de ustedes, es mejor que siga
viviendo. Al estar consciente de esto, estoy convencido de que seguiré con vida
para continuar ayudándolos a todos ustedes a crecer y a experimentar la alegría
de su fe. Filipenses 1.22-25
Pablo encontraba propósito en el vivir y en el
morir, para él cualquiera de las dos opciones tenia valor. La prisión no
determinaba el estado de animo de Pablo, piense en todas las cartas tristes que
se podrían escribir desde una prisión, llenas de un lenguaje de abandono y
soledad, si no supiéramos que Pablo escribe desde la cárcel, jamás nos
imaginaríamos que una carta ten llena de gozo y alegría hubiera sido escrita
allí.
Lo interesante es que Pablo dice que si vive será
para ayudar a los filipenses, por ningún lado encontramos que esté pensando en
sí mismo, o tenga planes de irse a descansar de toda la fatiga de la prisión.
Las personas buscan la felicidad en beneficios personales, pero lo que no han
entendido es que la verdadera felicidad se encuentra en vivir para servir a los
demás. Es difícil que las personas sean felices en un mundo que cada día se
torna más egoísta.
Con toda razón Pablo decía:
Porque
para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia. Filipenses 1.21
Como
para Pablo su vida era vivir para Cristo no había nada en la vida que
importara
más. Si tu pudieras decir “para mí el vivir es…” ¿Qué seria? ¿Qué pasaría si
perdieras ese algo que le da sentido a tu vida, pero por otro lado Cristo nunca
dejará de ser. Puedes vivir para Cristo porque es lo mejor que puedes hacer con
tu vida, y si tenemos que partir de este mundo entonces será ganancia. Una vida
con propósito hace la diferencia en medio de la adversidad.
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