Es interesante ver como algunos creyentes quieren ganar su ciudad pero ya no quieren vivir en ella, quieren que su
iglesia crezca pero no les agradan las personas que viven en la zona, (Y que las necesitan para que la iglesia crezca) quieren
que su célula se desarrolle pero continuamente suspenden las reuniones por
tomarse sus vacaciones, sus hechos niegan lo que con sus palabras dicen. Se
necesita más que palabras para ganar un lugar, se necesita compromiso
territorial.
El compromiso o pacto territorial, nos enseña que no hay
manera de conquistar nuestro territorio si no hacemos un compromiso sincero con
él.
Veamos en que consiste un compromiso territorial
AMOR POR LA TIERRA EN LA QUE HABITAS
El Señor espera que nos enamoremos de la tierra, en varias ocasiones vemos como lleva a los hombres para mostrarles la tierra antes de poseerla, de tal manera que cuando los hombres la miraran no hubiera otra meta en su corazón que conquistarla, cuando Dios envió espías para que vieran la tierra que habían de tomar, en vez de que ellos llegaran apasionados regresaron inconformes, temerosos, diciendo que era tierra que tragaba a sus moradores, desprestigiando de esta manera la tierra de la promesa.
Y los varones que Moisés envió a reconocer la tierra, y que al volver
habían hecho murmurar contra él a toda la congregación, desacreditando
aquel país, aquellos varones que habían hablado mal de la tierra,
murieron de plaga delante de Jehová. (Números. 14:36)
Muchas veces los lideres cometen el grave error de hablar mal de su tierra, viviendo inconformes con todo lo que tienen, siempre hablando bien de otras ciudades menos de la suya, o bien hablando bien de otros países pero mal del suyo, diciendo frases como “aquí la vida es difícil”, “aquí se sufre”, “aquí no hay trabajo”, “el clima es muy molesto”, “no hay lugares bonitos” “la ciudad esta fea” y de esta manera desacreditan su tierra, ¿Cómo puede Dios entregarle un territorio a aquel que no valora el lugar donde vive y siempre habla mal de el?
¿Podrás granar la tierra donde vives cuando anhelas vivir en otro lado?
¿Podrá el Señor entregarte la tierra cuando dónde vives cuando todo el
tiempo presumes de donde vivías antes? A muchos pastores les incomoda cuando
alguien de su iglesia habla mucho de la iglesia donde antes se congregaba, lo
mismo ocurre cuando alguien vive solo hablando de otros lugares menospreciando
la tierra que ahora tiene.
... Ése será su castigo por haberme rechazado y no reconocer mi presencia entre ustedes. Eso les pasará por haberse quejado y por decir: “¡Mejor nos hubiéramos quedado en Egipto!” Números 11.20 T.L.A.
Josue y Caleb por el contrario amaron la tierra de la promesa, y fueron
los únicos de aquella generación que pudieron disfrutarla.
Vosotros a la verdad no entraréis en la tierra, por la cual alcé mi
mano y juré que os haría habitar en ella; exceptuando a Caleb hijo de Jefone, y
a Josué hijo de Nun. Pero a vuestros niños, de los cuales dijisteis que serían
por presa, yo los introduciré, y ellos conocerán la tierra que vosotros
despreciasteis. Números .14:31
Los hijos de Israel no tomaron la tierra por tres razones (1) Desacreditaron la tierra. Es decir le quitaron su verdadero valor, si no la valoras ¿Con que derecho la reclamas? (2) Hablaron mal de ella. La desprestigiaron dijeron todo lo contrario a lo que Dios había dicho de ella, si la tierra no te gusta ¿para que tomarla? (3) La despreciaron. Es decir no la tuvieron en cuenta la rechazaron como si hubieran tenido mejores ofertas, tuvieron en más valor la tierra de Egipto. Si hay mejores tierras que donde vives ¿Por qué no te vas a vivir a ellas?
LA ACEPTACIÓN DE LA TIERRA
Si, acepto, es la expresión de un compromiso matrimonial, siempre se ha dicho que los cinco ministerios están representados por los dedos de la mano en el orden del pulgar al meñique, (apóstoles, profetas, evangelistas pastores y maestros) de tal manera que al Pastor le corresponde el dedo anular, el que lleva el anillo de compromiso, y esta verdad no está lejos de la realidad, el pastor ha sido llamado al compromiso no solo con su iglesia sino con su territorio, tienen que aceptar el llamado de vivir en ella hasta que la muerte los separe, sin embargo muchos albergan la esperanza de salir de su tierra, no les gusta la idea de vivir en ella toda la vida, buscan su reconocimiento y viajar por el mundo si estar ligados a un lugar, sin embargo el compromiso de permanecer en le tierra de por vida no significa que ya nunca saldrá, al contrario muchos de los que se han comprometido con su tierra y la han hecho prosperar son llevados a otros lugares por la fama que ha oído de la trasformación que han vivido.
¿Cómo pedir al señor que me entregue una iglesia grande donde estoy si
tengo planes de irme a trabajar en los próximos meses a otra ciudad?, o
involucrarme en un trabajo que no me dejara el tiempo suficiente para servir en
sus planes, o no imaginarme una vida ligado a una iglesia. Dios no te tomara en
serio, mientras sigas siendo inestable. Algunos quieren apoyar en abrir una
célula, pero que sea solo en los próximos dos meses porque tienen planes de
salir de vacaciones con la familia. Así no es cómo funcionan las cosas, se
requiere compromiso territorial.
INTERCESIÓN ESFORZADA
El compromiso territorial exige una intercesión sobrenatural, la mayoría de las iglesias tienen servicios de oración, pero pocas se inclinan a la guerra espiritual, a llevar la oración a niveles muy altos.
El nivel de intercesión nos demuestra que tanto deseamos la tierra, el
gran reformador escocés Juan Knox decía: “Dame Escocia, Señor o sino me
muero” no se puede ganar una ciudad haciendo oraciones una hora por semana,
con creyentes que solo están al pendiente de que la manecilla del reloj marque
la hora para retirarse, con creyentes que en una cadena de oración solo esperan
que llegue el relevo para terminar, con creyentes que en toda la hora de
oración solo dijeron “alabado, alabado, alabado, aleluya, aleluya, aleluya,
santo, santo, santo” porque no tenían más que decir.
Hoy en día las iglesias están entendiendo que el reino de los cielos
sufre violencia y solo los violentos lo arrebatan (Mateo 11:12) que la única
manera de tomar la tierra es haciendo guerra espiritual, Dios le da la victoria
a aquellos que demuestran que en verdad desean la tierra, que en verdad quieren
tomarla, que caminan por sus calles pisándola declarándola suya, que hacen
actos proféticos que parecen locura liberando sus territorios, que luchan
contra las potestades y las expulsan de la zona, que reconocen que no depende
solo de una buena visión sino del poder del Espíritu Santo acompañándolos, que
saben que para despojar al hombre fuerte es necesario primero atarlo, y que no
se lograra con oraciones simples y ojos cargados de sueño.
EL RESPETO DE LOS MINISTERIOS
Un compromiso territorial es también reconocer que no somos los únicos que Dios utiliza, y que para ganar una ciudad es necesario el respeto por el trabajo que realizan otros ministerios. Una de las operaciones de un hombre fuerte que tiene aprisionada una ciudad, es crear discordia entre iglesias y pastores, por asuntos de liturgias y estilos de alabanza.
En una ciudad hay iglesias antiguas que sus pastores merecen el respeto
por abrir el camino del evangelio, hay iglesias nuevas que sus pastores deben
ser valorados por ser una apoyo en la conquista del reino, hay iglesias
cristianas de muchas clases que no son una competencia sino más bien una
alianza para tener éxito en la conquista de la tierra.
AMOR POR LA GENTE QUE HABITA LA TIERRA
Y por último una de las características que yo considero de las más importantes de un compromiso territorial es el amor por la gente a la que estamos alcanzando. No se puede ganar al la gente por la cual no sientes amor alguno, hemos oído como creyentes se expresan con molestia de los habitantes de su tierra diciendo “aquí la gente es dura” “no quieren nada con Dios” “aquí la gente es mala” " la gente es grosera" “no te metas con ellos” etc., Y que esperábamos ¿que la gente respondiera que si a la primera invitación?, ¿Qué todos sean buenos? (no hay un bueno sino solo Dios) ¿Qué pensarían las personas de una iglesia si oyeran que sus líderes los consideran gente de lo peor? Qué triste seria para mí que quien me está tratando de ganar piensa que no valgo la pena, esa no es la forma en que el Señor miraba a la gente “Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor” Mar 6:34 en una ocasión escuche a un Pastor decir que necesitamos un bautismo de amor, y es verdad, no importa que tan grosera, y áspera nos parezca la gente de la comunidad valen el mismo precio que Jesús pago por ti, su sangre preciosa.
Este principio se lo enseño el Señor a Pedro, para que pudieran ser
alcanzados los gentiles. Pedro no podía alcanzar a aquellos que él consideraba
inmundos o comunes, mientras a tus ojos las personas sean desagradables y sin
valor no será posible que puedas alcanzarlas.
Y tuvo gran hambre, y quiso comer; pero mientras le preparaban algo, le sobrevino un éxtasis; y vio el cielo abierto, y que descendía algo semejante a un gran lienzo, que atado de las cuatro puntas era bajado a la tierra; en el cual había de todos los cuadrúpedos terrestres y reptiles y aves del cielo. Y le vino una voz: Levántate, Pedro, mata y come. Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás. Volvió la voz a él la segunda vez: Lo que Dios limpió, no lo llames tú común...Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas. Hechos 10.10-16, 34
Si en verdad deseas que Dios te utilice y que te entregue la tierra, haz
un compromiso con él, amando la tierra disfrutándola, bendiciéndola para que
prospere (pro. 11:11) aceptándola sin anhelar otros lugares, dando tu vida
intercediendo por ella y siendo su protector poniéndote en la brecha a favor de
ella, respetando a los pastores e iglesias que están a tu alrededor gozándote
cuando inicie una nueva iglesia o una célula cerca de tu casa, y sobre todo
amando a tu gente si no eres nativo de ella haciéndote como uno de ellos,
sintiendo compasión y amor por sus almas perdidas, y entonces el Señor te
entregara todo lugar que pisare la planta de vuestro pie.