¿Qué hago si un niño no se comporta o distrae a los demás?
Cuando un niño no se comporta o distrae a los demás en la clase, es importante manejar la situación con paciencia, amor y sabiduría. Esto es lo que puedes hacer.
Prevenir antes de corregir
- Establece reglas claras: Desde el inicio, explica con palabras sencillas lo que se espera de ellos.
- Mantén su atención: Usa dinámicas, cambios de tono de voz y materiales visuales para que no se aburran.
- Ubicación estratégica: Si sabes que dos niños se distraen juntos, siéntalos separados.
Actuar con amor y firmeza
- Acércate sin interrumpir: A veces, solo con poner una mano en el hombro del niño basta para que se enfoque.
- Haz contacto visual: Una mirada firme pero amorosa puede recordarle que debe estar atento.
- Dale una tarea: Algunos niños se distraen porque necesitan moverse o sentirse útiles. Asignarle una pequeña responsabilidad puede ayudar.
Corrección con gracia
- Habla con él en privado: No lo regañes delante de todos. Pregunta si algo le pasa y explícale cómo debe comportarse.
- Refuerza lo positivo: En lugar de solo decir lo que hace mal, felicítalo cuando hace algo bien.
- Si sigue comportándose mal, busca apoyo: Si el niño persiste en la distracción, puedes hablar con sus padres con amor y respeto para buscar juntos una solución.
Recuerda: Jesús nos mostró paciencia con los niños. La meta es guiarlos con amor para que aprendan y crezcan en el Señor.
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