Nuevas fuerzas


Tema: Nuevas fuerzas.

Isaías 40:31

Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.

En esta serie de todo es nuevo, no podemos dejar de mencionar que si hay algo nuevo que necesitamos tener en este inicio de año son “nuevas fuerza”. Muchos sin duda hemos terminado el año agotados y desgastados en muchos sentidos, pero una gran noticia es saber que en Dios siempre podemos renovar nuestras fuerzas.

En la Biblia la palabra fuerza la encontramos 360 veces y se aplica a la fuerza natural como a la fuerza sobrenatural. La palabra Katei significa:  Poder y fuerza. En la Biblia, la palabra fuerza normalmente esta vinculada al poder de Dios. La palabra de Dios nos enseña que como creyentes debemos ser fuertes en el Señor y en su gran poder.

Efesios 6:10

Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.

No importa que tan fuertes creemos que somos, la carne es débil, si tratamos de enfrentar la vida por nosotros mismos, por nuestros propios medios, caeremos en la tentación y fracasaremos en nuestros esfuerzos. Nuestra debilidad humana es la razón por la cual la Biblia nos recomienda la fuerza del Señor.

2 Corintios 12:9

Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.

El poder de Dios se perfecciona en nuestra debilidad humana por esa razón a medida que aprendemos a confiar en la fuerza de Dios en lugar de la nuestra, ganamos nuevas alturas.

Habacuc 3:19

El Señor Soberano es mi fuerza!
    Él me da pie firme como al venado,
    capaz de pisar sobre las alturas».

 

En este año procura que tu Fuerza este en Dios.

 

I.- QUE TU FUERZA SEA CRISTO.

Filipenses 4:13 NTV

Pues todo lo puedo hacer por medio de Cristo, [a] quien me da las fuerzas.

Como seres humanos procuramos buscar toda clase de formas para salir de los baches en los que muchas veces nos atoramos. Este año que ha terminado definitivamente nos metió en aprietos a muchos y sin duda alguna corrimos desesperados buscando ayuda, buscando la fuerza para salir día a día, muchos desmayaron, muchos se nortearon, muchos perdieron el rumbo, muchos llegaron a este nuevo año de puro milagro. Por eso es importante que reflexiones y pensemos en donde habíamos buscado las fuerzas que necesitábamos, cual fue la batería que nos mantuvo funcionando, en que nos inspiramos y qué fue lo que nos trajo hasta aquí. Que bonito seria responder que fue la fuerza de Cristo la que nos trajo hasta aquí y podemos decirlo, pero la realidad de muchos no es esa. Una gran nube de oscuridad y confusión debilito la fe de muchos y los hizo poner su fuerza, motivación y esperanza en falsas salidas.

Pero este es un nuevo año, un año donde podemos reconocer a Cristo como nuestra única fuerza y sobre todo que si vivimos en él tendremos el poder para hacer todas las cosas que necesitemos hacer, porque todo lo podemos en Cristo que nos fortalece.

II.-ALINEATE A SU FUERZA.

Santiago 4:7

Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.

Este pasaje es increíble porque nos enseña la extraordinaria manera de actuar del poder y la fuerza de Dios en nosotros. La fuerza, esta relacionada con la entrega, el sometimiento y la rendición a Dios. Normalmente somos capaces de vencer las adversidades cuando somos fuertes y no nos dejamos vencer, pero este pasaje nos enseña que la única forma en que podemos vencer a nuestro principal adversario es sometiéndonos y reconociendo nuestra debilidad ante Dios.

Este es un tiempo para alinearnos a la fuerza de Dios. Quiero decirte que no hay otra forma de vencer, este año nos espera con desafíos muy grandes, el enemigo aprovecha toda esta atmosfera para arremeter contra el creyente, contra las familias, contra nuestros hijos, contra todo lo diseñado por Dios y te digo algo: No hay forma de vencer más que alineándote ahora mismo a la fuerza de Dios. Reflexiona en todas las cosas que has permitido que te debiliten, malas decisiones, enojos, rencor, falta de perdón, división, prejuicios, orgullo etc.… Y apliquemos lo que la palabra nos está enseñando: Someteos, resistid y el diablo tendrá que huir.  Apliquemos la total sumisión, creo que eso está haciendo mucha falta, entonces seremos capaces de resistir las artimañas del maligno.

Efesios 6:10

Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.

III.- VIVE EN SU FUERZA.

Salmo 84:5-7  RVR 1977

Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas,
En cuyo corazón están tus caminos.
Atravesando el valle de lágrimas lo cambiarán en lugar de fuentes,
Cuando la lluvia llene los estanques.
 Irán de fortaleza en fortaleza;
Verán a Dios en Sión.

 

Dios no solamente quiere hacerte vivir una temporada de fuerza, donde puedas vencer a tus enemigos y seas capaz de derribar gigantes, de vencer la tentación y de enfrentar cada desafío que se presente. Dios quiere que puedas descubrir que en Él tienes una fuente inagotable de fuerza. Por eso en este pasaje nos dice que es bienaventurado el hombre que tiene en Dios sus fuerzas porque irán de fortaleza en fortaleza hasta encontrase con él en Sión.

 Si quieres permanecer en esa fuente

·         Tienes que reconocer que somos fuertes por su gran amor. (Gracia)

Hebreos 13: 9 TLA

 Por eso, no hagan caso de enseñanzas extrañas, que no tienen nada que ver con lo que Jesucristo nos enseñó. Esas reglas acerca de lo que se debe comer, y de lo que no se debe comer, nunca han ayudado a nadie. Es mejor que nos dé fuerzas el amor de Dios.

·         Tienes que buscar las fuerzas que te da la oración

Lucas 18.1

También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar,

·         Tienes que creer en su promesa de que Él siempre recompensa los esfuerzos.

 

Gálatas 6:9

No debemos cansarnos de hacer el bien. Si no nos rendimos, tendremos una buena cosecha en el momento apropiado.

Recuerda el pasaje de inicio: Muchos de los que nos rodean pueden cansarse y desmayar, pero aquellos que esperan en el Señor renovaran sus fuerzas. Se elevarán en alas como las águilas; Correrán y no se cansarán, caminaran y no desmayaran.

Isaías 40:31.    

 

Con amor Ps. Vanessa Xily Apac

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