Promesa de Esperanza

Promesa de Esperanza

Comenzamos con nuestra serie de este mes y estamos emocionados porque vamos a estar hablando sobre el tiempo de Adviento, el adviento como ya hemos dicho en otras ocasiones y como su nombre lo dice adviento significa llegada, por lo que es un tiempo de preparación para la llegada de la Navidad, además con el adviento comienza el calendario litúrgico de la iglesia, así que podemos decir ¡Feliz año nuevo! En el sentido litúrgico, el adviento es una fiesta de muchos años atrás, y comienza cuatro domingos antes de la navidad.

Algo muy especial que en esta serie estaremos compartiendo tiene que ver con la corona de adviento,  según algunos historiadores la corona de adviento tiene su origen en Alemania, cuando un pastor protestante intentaba enseñar a los niños de su escuela cuantos días faltaban para navidad, así que encendía una vela nueva cada domingo, por supuesto en esos tiempo el uso de las velas era muy común en las iglesias por lo que a veces relacionan la corona de adviento con una tradición católica, pero no es así, sino que al contrario con el tiempo el catolicismo también la adoptó.

Cada vela que se enciende durante el tiempo de adviento tiene un significado, y es de lo que estaremos durante los próximos cuatro domingos hablaremos de las promesas del adviento y el día de hoy comenzamos con la esperanza.

La biblia dice en el libro de Job
Lo mismo pasa con los malvados, con los que se olvidan de Dios: sus esperanzas quedan frustradas. 8.13

Wow la biblia dice que los que se olvidan de Dios sus esperanzas quedan frustradas, eso es precisamente lo que para muchos cristianos significó o significa la navidad, antes de que Jesús llegara, se anunciaba la navidad o la venida del mesías, por lo que esos anuncios daban esperanza al pueblo de Dios.

Pero cuando los que no creían en Dios no podían disfrutar de esa esperanza, en este tiempo el adviento no solo es un recordatorio de la llegada de Jesús como un bebé sino también es el anuncio de la llegada de Jesús como rey, porque como cristianos tenemos esperanza en la segunda venida de nuestro Señor. Me gusta mucho cuando en la primera película de las crónicas de Narnia los castores hablan de Aslan con mucha esperanza de que llegaría para salvarlos y dar fin al invierno que estaban viviendo.

Hoy tú no puedes vivir en este mundo como alguien que no tiene esperanza, porque Dios quiere que tengamos esperanza en Él. Así que comencemos por aprender tres principios sobre la esperanza que Dios quiere darnos.

Dios de esperanza

Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo. Romanos 15.13

Me encanta como Pablo llama a Dios, el Dios de esperanza, y que podemos abundar en esperanza por el poder del Espíritu Santo. No sé cuántos el día de hoy necesitan esperanza, creo que este tiempo ha sido muy difícil por lo que pienso que la esperanza de muchos se ha agotado, pero la biblia dice que en el poder del Espíritu podemos abundar en Esperanza. No solamente tener esperanza sino abundar en ella, creo que al grado de poder compartirla, si algo ha hecho la iglesia por generaciones es dar esperanza al mundo y la navidad es un tiempo muy apropiado para poder hacerlo, en estos días muchas personas se ponen muy sensibles, a tal grado que se dice que en estas fechas también muchas personas se suicidan, tal vez por no vivir lo que muchas familias están viviendo, es por eso que no debemos dejar de dar esperanza a los demás.

Quiero preguntarte ¿Dónde está puesta tu esperanza en este tiempo? Muchos ponen su esperanza en los gobiernos, esperan que ellos les resuelvan o por lo menos les ayuden con sus problemas, claro que los gobiernos existen para trabajar por el bien de las personas, pero si nosotros ponemos nuestras esperanzas en ellos en algún momento nos sentiremos decepcionados, nuestra esperanza debe estar puesta en Dios.

La esperanza no es optimismo

5 y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios está derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos es dado. Romanos 5.5

La esperanza como algunos la han definido es más teológica que psicológica, el optimismo es psicológico. Así que no es lo mismo tener esperanza que tener optimismo, en este tiempo de pandemia puedes hablar con algunas personas puedes verlas motivadas en medio de la crisis, pero esa motivación no es la misma en todas mientras que algunas son motivadas por esperanza otras lo son por el optimismo.

El optimismo es cuando alguien se dice así mismo que todo estará bien, cuando te convences de ver lo bueno en lo que estás viviendo, pero muchas veces no es así, en ocasiones por más que te trates de convencer tú sabes que no es correcto, es como en la película intensamente cuando alegría le dice a Tristeza: “¡Sé positiva!” y Tristeza le responde: “De acuerdo, sé positivamente que te vas a perder”

Por supuesto no es malo ser optimistas, porque de hecho es muy malo ser pesimistas, pero el optimismo tiene sus límites, solo funciona cuando tienes el control de las cosas. Pero la esperanza va más allá, mientras el optimismo dice: “no es tan malo”, la esperanza dice: “es malo… es muy malo, pero sigue creyendo”

Muchas personas optimistas se niegan a la realidad y negarse a la realidad no les ayudará mucho.

Esperanza segura.

Tú, Señor mi Dios, eres mi esperanza; tú me has dado seguridad desde mi juventud. Salmo 71.5 RVC

No todo lo que esperamos es esperanza real, hay esperanza engañosa o falsa, esta sucede cuando queremos que ocurra algo que sabemos internamente que no hay probabilidad de que ocurra, como cuando alguien espera de la nada tener un familiar millonario que le dejó una herencia, las probabilidades de que eso suceda son mínimas,  también hay esperanza expectante esto es cuando esperamos algo porque tenemos razones, como un campesino que espera cosechar porque sembró, o cuando se espera la llegada de un bebé, esa es esperanza expectante, pero debemos entender que aun así a veces no sucede lo que esperamos, pero hay una esperanza real y verdadera y esta es cuando esperas en fe.

Tener fe es tener la plena seguridad de recibir lo que se espera; es estar convencidos de la realidad de cosas que no vemos. Hebreos 11.1 NBLA

La fe nos da la seguridad de algo que esperamos, no puedes tener fe si no tienes esperanza, así que cuando las personas pierden la fe, primero perdieron la esperanza, ¿para qué creer en algo que no esperas?

Esta esperanza mantiene firme y segura nuestra alma, igual que el ancla mantiene firme al barco. Es una esperanza que ha penetrado hasta detrás del velo en el templo celestial. Hebreos 6.19

La biblia dice que la esperanza es como un ancla para un barco, eso es porque la esperanza es la que nos da estabilidad y evita que nos desviemos, es por eso que decimos que cuando alguien se aleja de Dios es porque ha perdido la esperanza en él.

Este día es importante para recordarnos que en Cristo tenemos esperanza, que nuestra fe en él nos dará la capacidad para continuar y seguir caminando en medio de la tormenta.