Valentía en el tiempo difícil

Valentía en el tiempo difícil

Sin embargo, yo confío en que veré la bondad del Señor mientras estoy aquí en la tierra de los vivientes. Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí espera al Señor con paciencia.  Salmo 27.13-14

¿Alguna vez ha encontrado alivio en los salmos? Pienso que sí, muchos de nosotros hemos encontrado un consuelo o aliento en algún salmo, de hecho, hay artículos que donde se recomienda un salmo para diferentes situaciones como para cuando estás enfermo, te sientes solo, estás triste, atemorizado, etc., pero en algún momento ¿has pensado que el salmista en la mayoría de los casos David se sentía exactamente así?  Detrás de un salmo hay una persona que vivió miedo, tristezas, soledad y que escribió sus sentimientos inspirado por Dios para que hoy nosotros fuésemos fortalecidos a través de esa palabra.

Todos hemos pasado tiempos de crisis que nos han golpeado fuertemente, algunos no pueden resistir y caen otros se mantienen con firmeza como las palmeras que resisten los fuertes vientos y permanecen. Cuando terminan esos tiempos podemos esperar dos resultados un fortalecimiento con expectativas de crecimiento o panorama desolador con pocas esperanzas, la diferencia entre los que se levantan para crecer y los que caen en la desesperanza está en cómo se enfrentan a esos tiempos. Las crisis son parte de nuestra vida y debemos aprender a lidiar con ellas.

Esto es muy importante especialmente cuando somos personas que guiamos a otras, porque creo que Dios nos escogió para poder dar vida aliento a los demás, tenemos una conexión especial con Dios que nos hace entender lo que a otros se les dificulta. Por supuesto también necesitamos del fortalecimiento de otros, pero en este caso lo digo en el sentido de como David a través de sus salmos con la inspiración de Dios le ha dado esperanzas, alegrías, fe, a muchos. Alguien que caminó por valles de sombra de muerte, alguien que vio el abandono del padre y de la madre, alguien que vio acampar un ejercito contra él, de tus tiempos de crisis puedes sacar vida para otros o puedes hundirte y perder el propósito por el cual Dios te llamó.

Me gusta en especial el salmo de hoy porque habla de ese tiempo de agonía que todos hemos pasado en el que no vemos la respuesta de Dios y a través de él David nos enseña como debemos enfrentar ese tiempo con valentía.

Debes ser valiente para creer en la bondad del Señor.

Sin embargo, yo confío en que veré la bondad del Señor… (v.13)

Una de las primeras cosas que no debemos perder en un tiempo de dificultad es la certeza de que Dios es bueno, en la película Dios no está muerto, hay una frase que repiten constantemente que dice:  Dios es bueno todo el tiempo y todo el tiempo Dios es bueno. Si hacemos de esta frase una de nuestras bases tendremos mayor seguridad acerca del futuro, porque sabemos que independientemente de las circunstancias Dios es bueno y sus planes para con nosotros siempre serán de bien.

Yo sé los planes que tengo para ustedes, planes para su bienestar y no para su mal, a fin de darles un futuro lleno de esperanza Jeremías 29.11 DHH

Por esa razón la primera tentación del diablo fue calumniar la integridad de Dios y poner en duda su bondad de Dios.

Eso es mentira. No morirán. ⁵ Dios bien sabe que, cuando ustedes coman del fruto de ese árbol, serán iguales a Dios y podrán conocer el bien y el mal. Génesis 3.4-5 TLA

Muchas veces indirectamente dudamos de la bondad de Dios cuando decimos: ¿Por qué Dios me tiene en esa situación? Pensamos que Dios podría resolverlo todo en un instante, pero nos desilusiona que no lo haga, él podría proveer de forma extraordinaria, pero tenemos que batallar para salir adelante. Entonces internamente ponemos en duda su bondad, como los hijos de Israel cuando dijeron;

¿Para qué nos ha traído el Señor a esta tierra? ¿Para morir atravesados por la espada, y que nuestras esposas y nuestros niños se conviertan en botín de guerra? ¿No sería mejor que volviéramos a Egipto?» Números 14.3 NVI

         En otras ocasiones el pueblo se había quejado de que Moisés los llevara al desierto, pero en esta ocasión se refirieron al Señor y en los versículos mas adelante vemos como el Señor se enojó con ellos, porque dudaron, pero especialmente dudaron de su bondad.

Debes ser valiente para creer que Dios actuará en nuestro tiempo

…mientras estoy aquí en la tierra de los vivientes (v.13)

A veces vemos tardar tanto la respuesta del Señor que pensamos que tal vez nunca la veamos, nos conformamos con pensar que quizás las próximas generaciones lo vean. Pero David dijo:

Sin embargo, yo confío en que veré la bondad del Señor mientras estoy aquí en la tierra de los vivientes…

Todos sabemos de la esperanza futura, de lo glorioso que será estar con el Señor, David también lo sabía, pero no creía que hasta que se fuera con el Señor vería su bondad, sino que esperaba verla en la tierra de los vivientes, es decir en esta vida.

La promesa de ver la obra del Señor en nuestro tiempo es segura especialmente para aquellos que le hemos dad nuestra vida.

Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de mí y del evangelio,  ³⁰que no reciba cien veces más ahora en este tiempo; casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna. Mateo 10.29-30

Cree que las promesas de Dios se cumplirán en tu tiempo, Dios es bueno contigo y quiere que vivas una vida abundante.

Debes ser valiente para esperar con paciencia.

Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí espera al Señor con paciencia. (v14)

¿Cuántas veces hemos hablado de lo difícil que es esperar? Esto es mas difícil cuando nos caracterizamos por ser personas impacientes, como dicen en estos días:  mi segundo nombre es paciencia. El primero es sin. ¿Qué tan paciente eres?  Porque cuando se trata de Dios la paciencia es una clave para triunfar.

Piense en los muchos personajes de la biblia que tuvieron que esperar p a c i e n t e m e n t e para ver la obra de Dios en su vida, personajes como Abraham que Dios le prometió un hijo y estaba envejeciendo hasta que Dios se lo dio y fue llamado padre de la fe, o como José que estuvo en prisión durante varios años después de haber tenido un sueño que le mostraba un futuro prometedor, pensemos simplemente en David el escritor del salmo quien sabe muy bien lo que es esperar pacientemente de Dios, fue ungido muy joven aproximadamente a los diecisiete años, y se convirtió en rey hasta los treinta años, pero no fue un tiempo de espera fácil, pues durante un buen tiempo Saúl se dedicó a perseguirlo para matarlo. Así que sí, David fue muy paciente.

La espera de ver la gloria de Dios es muy agobiante, muchas veces las cosas en lugar de mejorar empeoran, hacemos evaluaciones y cálculos y vemos que no estamos avanzando sino parece que al contrario más retrocedemos, solamente puedes confiar en que Dios es bueno y que no dejará que tu adversario salga triunfador. Eso es algo de lo que muchas veces vemos repetirse en los salmos, la preocupación de que los adversarios se salgan con la suya, que sean ganadores.

Note como en todo el salmo 27 David habla en tono de oración, pero en el ultimo versículo no habla con Dios ni con otras personas sino consigo mismo y se dice: espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí espera al Señor con paciencia.

Así que como el salmista tengo que mirarme al espejo y decirme a mí mismo: César espera al Señor, no te desanimes, no desmayes, las cosas van a cambiar, Dios no dejará que tu adversario salga ganador, esfuérzate y sé valiente, espera en la bondad y tiempo del Señor.

Me gusta ver como muchas veces la palabra paciencia está ligada con la palabra esfuerzo, porque muchas veces podemos ser valientes, pero ya estamos cansados para seguir intentándolo, o tal vez somos personas esforzadas, pero nos da miedo lo que pueda ocurrir, así que tenemos que ser esforzados y valientes.