Y él hará que padres e hijos se reconcilien. De lo
contrario vendré y castigaré su país, destruyéndolo por completo.» Malaquías
4.6 DHH
Continuamos
con nuestra serie del mes, durante estos
días hemos hablado sobre la importancia de la restauración. Existe una
restauración en especial que necesitamos en estos tiempos, y es la de padres e
hijos. Entre generación hay una crisis
de distancia, las generaciones viejas no encuentran conexión con las nuevas,
los intereses entre ambas son completamente distintos. Los padres tienen temas
de conversación que a sus hijos no les interesan, y los hijos tienen temas de
conversación que a sus padres no les interesan, esto crea un distanciamiento y
falta de comunicación, lamentablemente
creemos que al saludarnos durante el día cuenta como comunicación, pero
a muchos les sucede lo mismo como cuando tuvieron un noviazgo hablaban de temas
muy superficiales pero muy poco sobre lo que realmente importa en la vida.
Igual con los hijos se habla de temas sobre deberes escolares, quehaceres de la
casa, horarios etc., pero muy poco sobre temas que realmente importan.
El
problema no sólo es la falta de comunicación, sino la comunicación fastidiosa,
la que es solo para criticar o comparar, la crítica jamás será un método para
cambiar personas, y es la herramienta que más se utiliza cuando se intenta
cambiar la vida de alguien. Al criticar nos enfocamos en lo que no queremos en
lugar de lo que deseamos. Lo mismo sucede con la comparación, en el desayuno de
mujeres hace unos días se habló sobre esto, no hay nada más letal para una
relación que la comparación. Al igual
que la crítica la comparación nunca funcionará para ayudar a alguien, debido a
que todos tenemos una forma única con la que Dios nos ha creado, es inútil
hacer comparaciones.
Nadie
fue a la escuela para aprender a ser familia, y todas las familias tienen
dificultades, mientras las familias estén formadas por seres imperfectos serán
imperfectas. La biblia no oculta esto cuando describe la situación de los
hombres de Dios. Uno de los casos que más me ha llamado la atención es la
relación de David con su hijo Absalón. La
historia de David y Absalón nos muestra cuales fueron los errores que ambos
cometieron que los llevaron su conflicto familias a una declaración de guerra.
¿QUÉ DEBEMOS HACER PARA RESTAURAR LA RELACIÓN CON
NUESTROS HIJOS?
Para
entender un poco el trasfondo del conflicto David-Absalón, veamos lo que muchos
consideran el detonante de la crisis familiar de David.
David
cometió un terrible pecado cuando decidió tener una relación con una mujer
casada (Betsabé), pero eso no fue todo pues ella quedó embarazada y como el esposo (Urías) de ella estaba en la guerra David lo mandó a
traer y lo embriagó para así cubrir su
falta y atribuirle el hijo. Pero como este no quiso estar en su casa por su
compromiso de soldado, David decidió que lo mejor era ponerlo en el frente de
batalla para que muriera. Una vez muerto el esposo se casó con la viuda,
pensando que todo estaba arreglado y nadie sabría sobre el asunto, pero un día
llegó un profeta (Natán) y confrontó a David con su pecado. Y le dijo estas
palabras:
Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la espada, por cuanto
me menospreciaste, y tomaste la mujer de Urías heteo para que fuese tu mujer. 2
Samuel 12.10
Debes vivir en integridad. El
primer paso para no tener conflictos con nuestros hijos en el futuro es vivir
en integridad. A veces nos enfadamos por la conducta de nuestros hijos y los
reprendemos severamente, pero la
realidad es que muchas veces nosotros aun siendo adultos hemos cometido faltas
posiblemente más graves que ellos, podemos intentar llamarles pero es posible
que muchas veces nuestra reprensión internamente sea desechada por la conducta que hemos tenido.
Un día
uno de sus hijos de David (Amnón) abuso de una de sus hijas (Tamar) de
diferentes esposas, esto era sólo el principio de consecuencias que vendrían
sobre David.
Y luego que el rey David oyó
todo esto, se enojó mucho. 2 Samuel 13.21
David
se enoja por algo que su hijo hizo cuando el mismo había hecho antes. Pero es posible que no pueda decirle nada
porque el mismo había cometido un pecado similar.
Es
difícil llamarles la atención a los hijos cuando ellos han visto nuestra
conducta inapropiada, es difícil que un padre alcohólico pueda concientizar a
su hijo sobre no beber alcohol, o un padre mentiroso pueda enseñar a su hijo a
siempre hablar con la verdad.
Nuestras
acciones hablan más que nuestras palabras.
El
hombre bueno vive con integridad, ¡qué afortunados son los hijos que vienen
después! Proverbios 20.7
¿Eres completamente integro? Nuestros hijos ven
nuestra integridad continuamente, en especial cuando se trata de promesas. ¿Qué
tan fiel eres al hacer promesas? ¿Qué
tan rápido cambias delante de ellos?
Proverbios 25:14, "La persona que promete un
regalo pero nunca lo da, es como las nubes y el viento que no traen
lluvia.” (NTV)
Tal vez es tiempo de reconocer tus faltas, muchos padres no
están dispuestos a reconocer que se han equivocado. Creen que ser padres les da
el derecho a no ser confrontados, pero se equivocan, cuando nuestros hijos vean
que reconocemos nuestros errores aprenderán a reconocer los suyos.
Las reglas de la casa son: #1 Mamá siempre tiene la razón. #2
Si Mamá se equivoca, volver a leer la regla #1.
Debes poner atención a tus hijos.
Y le dijo su hermano Absalón: ¿Ha estado contigo tu hermano Amnón? Pues
calla ahora, hermana mía; tu hermano es; no se angustie tu corazón por esto. Y
se quedó Tamar desconsolada en casa de Absalón su hermano. 21Y
luego que el rey David oyó todo esto, se enojó mucho. 22Mas
Absalón no habló con Amnón ni malo ni bueno; aunque Absalón aborrecía a Amnón,
porque había forzado a Tamar su hermana.
23Aconteció pasados dos años, que Absalón tenía esquiladores en
Baal-hazor, que está junto a Efraín; y convidó Absalón a todos los hijos del
rey. 2 Samuel 13: 20-23
Muchas
veces hemos hablado sobre el espíritu de Absalón, como un espíritu rebelde
dentro de las iglesias, pero la realidad es que Absalón posiblemente no hubiera
causado tantos problemas a David, si David tan sólo hubiera tomado cartas en el
asunto. David simplemente se enojó, pero no hizo nada por corregir a
Amnón. La biblia dice que pasaron dos
años, y David no hizo nada. Posiblemente David no se sintió capaz de corregir a
su hijo, posiblemente eran tantos hijos que no tenía tiempo para todos ellos,
la biblia menciona veinte sin contar los hijos de las concubinas (1 Cr. 3.9)
posiblemente los deberes del reino lo absorbían lo cierto es que David
desatendió a sus hijos.
La
biblia dice que Absalón mata a su hermano Ammón y huye a tierra de su abuelo.
Con el paso del tiempo lo hacen volver.
Entonces el rey dijo a Joab: He aquí yo hago esto; ve, y haz volver al
joven Absalón. 2 Samuel 14.21
Pero nuevamente David no quiere hacer frente a la
situación que su hijo está viviendo.
Se levantó luego Joab y fue a Gesur, y trajo a Absalón a Jerusalén.
24Mas el rey dijo: Váyase a su casa, y no vea mi rostro. Y volvió
Absalón a su casa, y no vio el rostro del rey. 2 Samuel 14.23
28Y estuvo Absalón por espacio de dos años en Jerusalén, y
no vio el rostro del rey. 2 Samuel 14.28
Absalón tuvo que hacer algo
descabellado para poder ver a su padre.
Y mandó Absalón por Joab, para enviarlo al rey, pero él no quiso venir;
y envió aun por segunda vez, y no quiso venir. 30Entonces dijo a
sus siervos: Mirad, el campo de Joab está junto al mío, y tiene allí cebada; id
y prendedle fuego. Y los siervos de Absalón prendieron fuego al campo. 31Entonces
se levantó Joab y vino a casa de Absalón, y le dijo: ¿Por qué han prendido
fuego tus siervos a mi campo? 32Y Absalón respondió a Joab: He
aquí yo he enviado por ti, diciendo que vinieses acá, con el fin de enviarte al
rey para decirle: ¿Para qué vine de Gesur? Mejor me fuera estar aún allá. Vea
yo ahora el rostro del rey; y si hay en mí pecado, máteme. 2 Samuel 14.29-32
Hace cuanto tiempo que no
hablas con tu hijo sobre asuntos importantes, lamentablemente muchos padres
tienen que esperar que llegue una crisis a sus vidas para poner atención a sus
hijos y algunos ni siquiera son capaces de ver los incendios que sus hijos
están provocando para poder ser atendidos.
Ignorar
lo que está pasando con tus hijos creará problemas en el futuro, pues si no te
puedes comunicar con ellos ahora difícilmente lo harás cuando ellos crezcan.
David tal vez pensó lo que muchos hoy en día que el tiempo cambiaría las cosas,
creyó que Absalón olvidaría lo de su hermana.
A veces creemos que es sólo una etapa de la edad pero no nos damos
cuenta que están desarrollando su
personalidad. Algunos piensan que como ya crecieron cambiaron y la realidad es
que muchos no cambian sólo se vuelven más astutos para conseguir lo que
quieren, saben esconder sus errores,
desarrollan estrategias para manipular. La historia nos muestra que Absalón
aparentemente se reconcilió con su padre pero la realidad es que ahora comenzó
a causar daño a escondidas de él.
Y se levantaba Absalón de mañana, y se ponía a un lado del camino junto
a la puerta; y a cualquiera que tenía pleito y venía al rey a juicio, Absalón
le llamaba y le decía: ¿De qué ciudad eres? Y él respondía: Tu siervo es de una
de las tribus de Israel. 3Entonces Absalón le decía: Mira, tus
palabras son buenas y justas; mas no tienes quien te oiga de parte del rey.
4Y decía Absalón: ¡Quién me pusiera por juez en la tierra, para que
viniesen a mí todos los que tienen pleito o negocio, que yo les haría
justicia! 5Y acontecía que cuando alguno se acercaba para
inclinarse a él, él extendía la mano y lo tomaba, y lo besaba. 6De
esta manera hacía con todos los israelitas que venían al rey a juicio; y así
robaba Absalón el corazón de los de Israel. 2 Samuel 15.2-6
Debes poner atención a todo lo
relacionado con tu hijo, cada vez que hace algo que no es correcto debes
encontrar la forma de ayudarlo, cuando no es responsable, cuando trata de
manipularte, cuando se siente insatisfecho, cuando se sale con la suya. No es
sólo una etapa es su formación la cual lo definirá cuando sea adulto.
A veces la generación nos separa
y no mostramos interés en lo que actualmente a ellos le llama la atención,
debemos aprender a involucrarnos en sus vidas sin ser un fastidio continuo que
los orille a esconderse de nosotros.
SER FIRME. El error más grande de David fue su
indulgencia, cuando Amnón abuso de su hija no hizo nada, cuando Absalón mato a
Amnón no hizo nada, y su indulgencia lo llevo a la crisis con su hijo.
Pero tanto presionó Absalón al
rey que, al fin, dejó que Amnón y sus otros hijos fueran a la fiesta. 2 Samuel
13.27
En este pasaje vemos como David no podía mantener su firmeza delante de
sus hijos, simplemente terminaba por ceder en todo lo que querían.
A
veces confundimos la falta de disciplina con amor, creemos que al ser consentidores les estamos dando amor, pero la
realidad es que ellos no lo ven así, cuando nosotros consentimos ellos saben
cómo conseguir lo que quieran. Estamos
programándolos erradamente, para conseguir lo que quieren con los medios más
molestos.
»Porque Dios corrige y castiga a todo aquel que ama y que considera su
hijo.» Hebreos 12.6
Imagínese si Dios nos
dejara hacer lo que quisiéramos y sin consecuencias. Este mundo sería un
completo caos. Debemos tener el valor de disciplinar cuando sea necesario. Pero
debemos saber cómo enseña el doctor Dobson, distinguir muy bien cuando lo que hace
nuestro hijo es un acto voluntario de desobediencia y cuando simplemente es una
irresponsabilidad. Muchas veces somos severos cuando han actuado
irresponsablemente como cuando se les olvida hacer alguna tarea determinada, y
somos más tolerantes cuando son descaradamente desafiantes de la autoridad, o
simplemente ellos tienen el mando en el hogar. Ha oído a alguna madre decir “no
puedo decirle nada”, “me da miedo decirle algo” es el punto cuando nos damos
cuenta quien tiene el control en el hogar.
No
dejes de disciplinar a tus hijos; la vara de castigo no los matará. 14 La disciplina
física bien puede salvarlos de la muerte. Proverbios 23.13-14 NTV
El tema de la disciplina corporal es muy delicado
para esto recomiendo el libro “como criar un niño de voluntad firme” y
“atrévete a disciplinar” de James Dobson donde se habla sobre el tema
ampliamente. Pero lo cierto es que la Palabra de Dios no puede dejar de ser
Viva. Por supuesto la corrección se ha visto como algo negativo por la historia
de padres abusadores que pasaron de la corrección a la violencia, por otro lado
también es un error cuando los padres quieren disciplinar físicamente a sus
hijos jóvenes cuando no lo hicieron cuando eran pequeños, la corrección no es
de todos los días ni para toda la vida, si podemos mostrar firmeza con nuestros
hijos es posible que no necesitemos de la corrección corporal en ningún
momento.
Por Arieh G…
¿QUE DEBEMOS HACER PARA RESTUARAR LA REACION CON NUESTROS
PADRES?
Debes tener un
corazón humilde.
Una de las cosas que vemos que son necesarias para que
podamos restaurar una relación con nuestros padres es humildad, sin humildad
nunca vamos a poder aceptar los errores que seguramente también hemos cometido
para poner la relación patas arriba.
Porque un
corazón orgulloso no es buena tierra en la cual se puede trabajar, por ejemplo
Absalón, no tenía humildad definitivamente. Para que alguien se vuelva una
persona orgullosa debe haber algo que ocasione esta actitud, en el caso de
Absalón hay una razón:
En todo Israel no había un hombre tan bello y
atractivo como Absalón, pues no tenía ningún defecto.26 El pelo se lo cortaba cada año, cuando ya lo
tenía muy largo, y lo que le cortaban pesaba más de dos kilos. 2 Samuel
14.25-26
Absalón tenía toda esta
apariencia física que lo hacía sentirse como el mejor de todo en la tierra, eso
era seguramente una de las razone por la cuales se sentía superior a los demás
y pensaba que podía ganar con un corazón orgulloso
Y en muchas ocasiones nos sentimos
superiores a nuestros padres como Absalón se sentía seguramente. Por nuestros
conocimientos, por esta época tan tecnológica y globalizada y creemos que somos
superiores a nuestros padres por comprender más sobre muchos temas, cuando en
realidad eso no es más que la viva imagen de una persona orgullosa, y con ese
orgullo muchas veces dejamos en mal a nuestros padres.
Por todo el orgullo que Absalón tenía, y
por todo el distanciamiento que había surgido dejó en mal a su padre en
infinidad de ocasiones según el capítulo 15:
Todos los días se levantaba
muy temprano y se paraba a un lado del camino, a la entrada de la ciudad. Si
alguien iba a ver al rey para arreglar sus problemas, Absalón lo llamaba y le
preguntaba de dónde venía. En cuanto aquél le decía de qué tribu era, 3 Absalón le aseguraba: 3.
—Lo
que pides es muy justo, pero el rey no tiene a nadie que atienda estos
asuntos. 4 Si
yo gobernara este país, los atendería y les haría justicia.
Entonces, por todo el orgullo que Absalón tenía dejaba en mal a su
padre delante de las demás personas. Imagínense que todos los días la gente que
iba en busca del rey se regresaba porque
Absalón les decía que nadie los podía atender.
En muchas ocasiones
ponemos en mal a nuestros padres, delante de nuestros amigos, compañeros, de
las personas a nuestro alrededor incluso delante de nuestra propia familia y no
nos importa lo que los demás puedan pensar de ellos.
Nosotros somos su vivo
reflejo, si ponemos en poco entonces estamos dejando en claro lo bajo que
también somos nosotros, pero si los ponemos en el más alto de los niveles
aunque probablemente tengan muchos defectos como cualquier ser humano, entonces
las personas a nuestro alrededor también se van a dar cuenta de lo grande que
somos nosotros y la restauración de Dios va a ser clara en nuestra familia.
Acercamiento
Aunque en ocasiones no tengamos un corazón orgullo hay
otras cosas que nos alejan de una completa restauración como por ejemplo, el
distanciamiento de nuestra familia, un corazón rencoroso o fuertes sentimientos
de venganza como ocurre como Absalón.
Su hermano Absalón la vio y le
preguntó: «¿Es verdad que Amnón ha estado contigo? Bien, hermanita, quédate
callada por ahora, ya que él es tu hermano. No te angusties por esto»… 2 Samuel
13.20
Y pasaron 2 años completos. Imagínense que durante todos estos años
Absalón estuvo planeando y arraigando más y más estos sentimientos terribles de
venganza en contra de su hermano Amnón, durante esos 2 años estuvo planeando
una muerte y se distanció de Amnón porque la biblia dice que no le hablaba.
Así ocurre con nosotros, nos
enojamos con nuestra familia por muchas razones, sé que hay infinidad de
razones maduras y reales por las cuales un joven puede tener rencor en contra
de su familia. En este caso Absalón se enfadó porque su padre nunca actuó respecto
a este tema. Y muchas veces nos enojamos con nuestra familia porque pensamos
que no toman en serio lo nuestros o problemas o porque incluso ellos mismos
hacen acciones que nos hacen sentir muy mal. Y vivimos llenos de rencor y odio.
Y cuando no aprendemos a
perdonar, y nos encerramos en nuestras raíces de amargura que llevan años
creciendo no nos permitimos llegar al momento en el cual debemos dejar todo de
lado y perdonar a nuestra familia, y olvidar el pasado, olvidar cada situación
e intentar comenzar de nuevo, porque para una verdadera restauración
necesitamos acercarnos de nuevo a nuestra familia, ya no tenemos que seguir
distanciados, porque Dios nos da una razón para perdonar y es su mismo amor. Si
lo tenemos con nosotros ¿Por qué no podemos perdonar a los demás?
Honra a tu padre y
a tu madre.
Honra a tu padre y a tu madre,
para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da
el Señor tu Dios. Éxodo 20.12
Al final de la historia
Absalón logra sus intereses y el reino entero se le une en una rebelión total
en contra de David. Ahora, así como Absalón tenía planeado seguramente una vida
larga para gobernar Israel, así nosotros también tenemos muchos sueños y
anhelos que queremos lograr en nuestra vida, muchos de ellos se cumplirán si
estamos con Dios porque el abre las puerta. Por su parte Absalón no habría de
lograr ninguno de sus planes.
Absalón, que huía montado en
una mula, se encontró con los soldados de David. La mula se metió por debajo de
una gran encina, y a Absalón se le trabó la cabeza entre las ramas. Como la
mula siguió de largo, Absalón quedó colgado en el aire.10 Un soldado que vio lo sucedido le dijo a Joab:
—Acabo de ver a Absalón
colgado de una encina.
—No voy a malgastar mi
tiempo contigo —replicó Joab.
Acto seguido, agarró tres
lanzas y fue y se las clavó en el pecho a Absalón, que todavía estaba vivo en
medio de la encina. 15 Luego,
diez de los escuderos de Joab rodearon a Absalón y lo remataron. 2 Samuel 18.
9-15
La biblia dice en Génesis
“Honra a tu padre y a tu madre para que tus días se alarguen” pero Absalón
nunca honró a su padre, lo puso en mal delante del pueblo y se distanció de él,
además sus planes no eran los más buenos conforme al propósito de Dios. Ya que
en muchas ocasiones no les damos a nuestros padre el respeto que se merecen de
verdad por todas las coas que han hecho por nosotros, independientemente de las
que no han sido las más acertadas o las que más nos agraden.
Para poder restaurar la
relación con nuestros padres debemos honrarlos, porque además de eso Dios nos
promete días más largos y una vida extensa, y si nuestros sueños son sus
sueños, entonces no tenemos nada más de que preocuparnos.
Aprendemos que para
restaurar una relación con nuestros padres y familia debemos dejar a un lado
del orgullo y tener un corazón humilde, porque sin eso no vamos a lograr una
verdadera restauración.
Lo segundo que aprendemos es
que para restaurar nuestra familia debemos acércanos a ellos, porque de esa
forma vamos a darnos cuenta de que ellos mismos a veces también quieren cambiar
nuestra situación y necesitan de nuestra fuerza para transformar la suya.
Y lo último es que honrando a
nuestros padres nuestros días se van a alargar y todos los planes que tengamos
dentro del propósito de Dios se van a cumplir, porque vamos a tener una familia
restaurada y al mismo tiempo una hermosa relación con Dios.
Todos podemos restaurar a nuestra familia,
solo necesitamos comenzar a dar los pasos.
Entonces el rey se turbó, y
subió a la sala de la puerta, y lloró; y yendo, decía así: !!Hijo mío Absalón,
hijo mío, hijo mío Absalón! !!Quién me diera que muriera yo en lugar de ti,
Absalón, hijo mío, hijo mío! 2 Samuel 18.33
No era necesario vivir este momento si tan sólo hubieran tenido una
buena relación de padre e hijo.
No hay comentarios:
coméntanos si te ha sido de utilidad esta publicación,