Extendiéndonos hacia la meta

 

Serie. ¡Vive!

Tema. Extendiéndonos hacia la meta

Durante esta serie hemos estado hablando de lo importante que es aprender a vivir durante esta pandemia y no solo sobrevivir, aprender a tener el control de las circunstancias y no que ellas nos controlen.

Una clave importante para lograr aprender a vivir es tener una meta en la vida, una razón por la que algunas personas pierden el sentido de la vida es porque no tienen una meta hacia la cual ir. Cuando alguien no tiene una meta definida el diario vivir se vuelve un poco aburrido y frustrante. Sin metas todo lo que hagamos solo será carga y trabajo, un estudiante que no se inspira en lo que se puede convertir, su estudio se vuelve trabajoso, un empleado que no aspira a un puesto o espera lograr algo a través de su empleo, solamente sentirá el agobio del trabajo diario.

Cuando nuestra vida no tiene sentido y entra en depresión algo importante que necesita es que le demos una meta para volver a activarse, la depresión es una señal de que algo no anda bien en nosotros, si no hacemos solamente seguiremos empeorando, así que para superar la depresión se necesita tomar acciones, a veces aunque parezcan mínimas debemos hacerlas, descansar bien, alimentarnos bien, ejercitarnos, escuchar música, todas estas son acciones que le dicen a nuestro organismo que estamos haciendo algo para aliviarnos. Cosas como estás Dios le dijo a Elías que hiciera cuando estaba en crisis de depresión, comió, durmió, pero sobre todo Dios le dio una meta, le dio tareas para volver a activarse y continuar su vida.

Estamos casi por finalizar el año y es un buen momento para ir estableciéndonos metas, la biblia dice:

No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante. Filipenses 3.12-13

Tu vida no tiene que ser perfecta

No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; Filipenses 3.12a NVI

Me encanta este pasaje porque Pablo habla de que su vida no está al cien ni que sea perfecta. Esto es algo que muchos hoy debemos entender. El problema con esto es que muchos sienten que tienen que vivir vidas perfectas, de nuevo las redes son un factor que presiona a muchos a querer vivir así, los logros y triunfos por todos lados hacen que muchos no se puedan sentir satisfechos con sus propios logros, algunos no se querrán quedar atrás e intentaran demostrar que también pueden hacer ese algo que otro está haciendo, pero aceptémoslo no somos buenos en todo, hay muchas cosas que no nos saldrán bien.

Es increíble como muchas veces podemos sentirnos presionados a mostrar vidas perfectas sin mostrar debilidad de ninguna forma, sobre todo cuando nadie nos está pidiendo perfección, y si en algún momento Jesús nos dijo que fuéramos perfectos como nuestro padre que está en el cielo, el mismo también dijo que nadie es bueno sino solo Dios. Así que, por supuesto que Dios busca perfeccionamiento de parte nuestra pero no impecabilidad, pues conoce muy bien nuestras limitaciones.

Tal vez algunas personas no quieren verse débiles porque temen ser rechazadas o heridas por los demás, pero eso es muy frustrante porque en tu interior tú sabes que tienes errores. A veces la mejor forma de ayudar a otros es cuando reconoces tus errores y les haces saber que aun con ellos has salido adelante. Por ejemplo, en nuestro caso como pastores si todo el tiempo queremos mostrarnos fuertes y escondemos nuestras debilidades hacemos que la gente crea que es imposible para ellos vivir la vida cristiana por sus debilidades, como se dice en otras palabras se pone la vara muy alta e inalcanzable para los demás. Pero si ellos nos conocen y se identifican y ven como nos esforzamos por enfrentarlas ellos también lo harán y saldrán adelante.

Además, querer vivir vidas perfectas no solo es frustrante para la persona sino aún para las que lo rodean. Muchas familias sufren crisis porque no dejan que sus miembros sean humanos y se equivoquen o cometan errores. Deja a tu hijos o cónyuge ser humanos, deja que sean quienes realmente son, tristemente algunas familias tienen robots entre sus miembros porque todo el tiempo tienen que actuar para tener contento a alguien de la familia, pero eso es no dejarles vivir la vida.

Tratar de ser perfecto no te deja vivir.

Tu pasado no debe controlarte

…olvidando ciertamente lo que queda atrás… Filipenses 3.13

Después de decirnos que su vida no es completamente perfecta pablo nos enseña como logra vivir con eso y nos da la primera clave que es no dejar que tu pasado te controle.

El pasado puede controlarte cuando ha sido un fiasco

Muchas personas viven estancadas por los eventos desagradables vividos en el pasado, estos pueden ser pecado, pobreza, dolor etc., y estos monstruos pueden perseguir a las personas durante toda su vida.

El miedo a volver a vivir una vida de escases para algunos puede ser algo que hoy puede afectarles, muchas personas huyen de su pasado sin evitándolo, pero a la vez los persigue porque no lo han podido sanar, es increíble que algunas personas tratan de inventarse otra vida omitiendo su pasado viviendo una vida de negación, pero entre más lo niegan más lo hacen presente en sus vidas, jamás aprenderán y tampoco podrán a ayudar a otros a superar esas mismas crisis.

Por otro lado el pasado puede controlarte cuando ha sido exitoso, cuando has experimentado cosas extraordinarias y ahora te encuentras en un bache del que te está costando salir, algunas personas posiblemente vivieron buenas vidas antes de llegar a Jesús y ahora que lo conocen las dificultades les dicen que estaban mejor sin conocerlo, los logros del pasado pueden ser un peso para proyectar el futuro, pueden ser una tentación a retroceder, porque el futuro es incierto y el pasado ya es conocido, así que el temor a lo que no saben puede ser engañoso.

Tu futuro debe tener una meta

…y extendiéndome a lo que está delante. Filipenses 3.13

Como ya dijimos lo que necesitamos hoy es tener una meta, me encanta la forma en la que Pablo nos enseña, porque en esta parte se está refiriendo a cuando los corredores están por llegar a la meta y tienen que aventar la cabeza hacia el frente para poder llegar en primer lugar.

Me llaman la atención algunos videos en YouTube donde los corredores literalmente se tiran de clavado con el fin de poder llegar antes que los otros corredores porque lo importante es que el tronco del cuerpo sea el primero que entre para definir al ganador, esto para nosotros tal vez no sea muy importante, pero para un atleta que ha puesto su vida en esa carrera lo puede ser todo.

 ¿Cómo vas en tu carrera? Tal vez ni siquiera has comenzado o no tienes una meta, esto puede ser porque el pasado te tiene atrapado, pero no es momento de quedarse en el pasado, es momento de mirar hacia el frente hacia la meta que tienes por delante.

No solo se trata de correr, se trata de correr con una meta y se trata de hacer todo lo posible por cruzarla. Trato de pensar como hace un atleta ese movimiento de aventar la cabeza mientras corre. Hoy Dios quiere que empujes tu cabeza hacia delante. Que no te rindas, que no te detengas, que aun cuando estés cerca de la meta hagas todo lo posible por entrar en primer lugar, a eso se le llama esfuerzo.

Tal vez te cuesta vivir cada día, tal vez no hay muchas cosas que puedan animarte, pero hoy tienes que comenzar a fijar una meta en tu vida y comenzar a correr hacia ella.