Tormentas que nos reorientan


Tormentas que nos reorientan
Estamos contentos porque comenzamos nuestra nueva serie En la tormenta, sin duda estamos viviendo tiempos que consideraríamos tormentosos, incluso por momentos podemos pensar que estamos viviendo en medio de varias tormentas, como en la película la tormenta perfecta.


Y aunque relacionamos el termino tormenta con situaciones difíciles de nuestra vida, la otra verdad es que las tormentas también tienen sus beneficios, zonas calientes como el sur de Veracruz son aliviadas cuando hay tormentas y por supuesto alivian cuando hay sequía, se dice también que combaten la marea roja, las tormentas ayudan a equilibrar la temperatura del mundo, esto sin contar todos los beneficios que traen los rayos incluidos en las tormentas.

La mayoría hemos escuchado acerca de la vida de Jonás, sabemos que Dios le envió a dar un mensaje a la ciudad de Nínive, pero él se niega, así que desencadena una serie de eventos que complican todo en su huida.

La tormenta en la que Jonás se encuentra nos da una lección sobre tres acciones que debemos tomar cuando nos encontremos en una tormenta.

Distingue tus tormentas

Cuando ya estaban en alta mar, Dios mandó un viento muy fuerte que pronto se convirtió en una terrible tempestad. El barco estaba a punto de romperse en pedazos. Cada uno de los marineros, temblando de miedo, llamaba a gritos a su dios… Jonás 1.4-5

Es un hecho que algunas situaciones de nuestra vida son el resultado de nuestras malas acciones, así que no tenemos que ser muy espirituales para darnos cuenta que algunas tormentas que estamos viviendo son resultado de nuestras malas decisiones, es algo así como el meme ¿Señor que hice para merecer esto? A ya me acordé.

Debemos notar que los marineros expertos en viajes en el mar se aterrorizaron por la tempestad que los estaba golpeando, en lugar de hacer sus esfuerzos propios de su oficio, no pensaron en otra opción que encomendarse a su dios.

Es interesante que en este tiempo que estamos viviendo hay personas que están siendo sensibilizadas a buscar a Dios y algunos que tienen el conocimiento están ignorando sus mensajes.


y por la mañana, que habrá tempestad porque el cielo está nublado y amenazante. Ustedes saben discernir el aspecto del cielo, pero no las señales de los tiempos. Mateo 16.3 NVI

Jesús dijo que las personas podrían saber cuándo vendrían tormentas a sus vidas, pero no entenderían sobre los tiempos de Dios.

Tienes que reflexionar si la tormenta que estas pasando es parte de un proceso definido para tu vida. Aprender a distinguir la tormenta pude hacer la diferencia en lo que estarás viviendo en los próximos días.  

Enfrenta la tormenta

 Cada uno de los marineros, temblando de miedo, llamaba a gritos a su dios. Ya desesperados, arrojaron al mar toda la carga del barco para quitarle peso. Mientras tanto, Jonás dormía plácidamente en la bodega del barco. El capitán se le acercó y le dijo: —¡Qué haces aquí, dormilón! ¡Levántate y pide ayuda a tu dios! ¡Tal vez nos salve al ver que estamos en peligro! Jonás 1.5-6

¿La tormenta no cambia si tu no has cambiado?

¿Cómo puede ser posible que en un tiempo difícil los primeros que clamen a Dios sean quienes menos conocimiento tienen de él? Sin embargo, debemos pensar que después de haber despertado y ver la tormenta Jonás intentó orar, pero aquí hay una realidad que debemos tener presente, la tempestad no se detuvo porque Jonás orara, él ya sabia que era lo que Dios quería de él. A veces hay quienes pasan tiempo orando, pero no han conseguido nada porque están evitando lo que precisamente Dios les ha estado pidiendo.

¿Qué es lo que Dios te ha pedido? ¿A que te resistes? Sabes que has estado orando por algo, pero también sabes que tienes pendientes con Dios.

La tormenta no cambiará a menos que tú cambies.

Tienes que buscar el origen de la tormenta.

Al mismo tiempo, los marineros decían: —Echemos suertes para saber quién tiene la culpa de nuestra desgracia. Echaron suertes, y Jonás resultó culpable. Jonás 1.7

En medio de su angustia los marineros echaron suertes, cosa que se acostumbraba en su tiempo, incluso hasta cuando se eligió al discípulo que sustituiría a Judas, y la suerte obviamente dirigida por Dios cayó sobre Jonás.

A veces tardamos mas tratando de controlar la tormenta, pero deberíamos concentrarnos en lo que la está provocando. Debemos analizarnos y encontrar raíces que nos están afectando, tal vez para nosotros es muy normal pero no es correcto y tenemos que cambiarlo.

Enfrenta la tormenta con responsabilidad

Entonces, los marineros preguntaron a Jonás: —¡Dinos ya por qué estamos sufriendo todo esto! ¿En qué trabajas? ¿De dónde vienes? ¿Cuál es tu país? ¿De qué nacionalidad eres? 9 Jonás respondió: —Soy hebreo y adoro a nuestro Dios, soberano y creador de todas las cosas. Lo que está pasando es culpa mía, pues estoy huyendo de él. Jonás 1.8-9

Debemos reconocer el valor de Jonás para dar todos los detalles de su desobediencia, en ocasiones como estas debemos tener el valor de pararnos y aceptar nuestra desobediencia, por lo regular la gente se justifica, atribuye a otros su error, culpa a todos los posibles, se justifica diciendo que fue presión o alguna otra razón, pero pocos aceptan sus errores.

Es interesante como los marineros entienden lo que Jonás ha dicho que ellos mismos le preguntan que es lo que deben hacer. Por lo que Jonás sugiere que si él es el problema de que el barco se esté despedazando entonces con el fuera del barco todo se debe tranquilizar. Y aunque les pareció una idea terrible e intentaron controlar la nave, no tuvieron opción mas que enviar a Jonás al mar.

Aprende de la tormenta

 Entonces los marineros tomaron a Jonás y lo tiraron al mar. De inmediato el mar se calmó.  Al ver lo sucedido, los marineros reconocieron al Dios de Israel como su Dios, le presentaron una ofrenda y prometieron seguir adorándolo. Jonás 1.15-16

Encuentra el lado bueno de la tormenta
Algo bueno salió de este desatino de Jonás, la tripulación de aquel barco se convirtió al Dios de Israel. La tormenta no es solo para causar destrucción y aterrorizar, es para volver los corazones a Dios, es para que los hombres vean los milagros de Dios y crean. Siempre será para que Dios sea glorificado.

Encuentra tu antes y tu después
Entonces Dios mandó un pez enorme, que se tragó a Jonás. Y Jonás estuvo dentro del pez tres días y tres noches. Jonás 1.17

Jonás en el vientre del pez representó la muerte de Jesús y su resurrección, igual esto significa un antes y después en nuestras vidas, como cuando nos bautizamos y morimos al mundo, en la tormenta tienes que encontrar tu antes y después, la tormenta no está para matarte sino para reubicarte, para volver a conectarte con Dios

Encuentra una segunda oportunidad
Por fin, Dios le ordenó al pez: «¡Arroja a Jonás en la orilla del mar!» Jonás 2.10
Como un GPS que te reubica después de que te desvías del camino Dios reubicó a Jonás y lo colocó en el lugar donde debió haber estado desde el principio. Cuando Dios tiene un plan con tu vida alégrate por las tormentas porque su propósito sigue en pie, ¿nada es casualidad en el camino de Dios? Hoy tu y yo estamos aquí porque Dios así lo ha decidido, hoy tienes una segunda oportunidad, que no debes desaprovechar.

Retoma lo que has dejado inconcluso.
¿Qué es aquello que no has terminado? ¿Qué es lo que Dios te ha pedido por mucho tiempo y tienes detenido? Hoy Dios te ha reubicado con la tormenta y espera que esta vez decidas hacer lo correcto.


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