Me enoja

Me enoja

Continuamos con nuestra serie del mes Emoción Reacción, así que el día de hoy hablaremos sobre el tema del enojo, creo que hay una gran confusión con el tema del enojo, pues muchos cristianos parecen afirmar que un cristiano no puede enojarse. Pero cuando leemos la biblia podemos ver que algunos personajes tuvieron momentos de enojo, incluso podemos ver al mismo Señor Jesús enojado cuando saco a todos los mercaderes del templo, por supuesto el mal no está en el enojo en sí sino en la forma en la que se canaliza, puede haber efectos negativos o positivos detrás del enojo.

Como iglesia trabajamos mucho en poder ayudar a las personas con sus problemas por supuesto en el nombre del Señor, así que tenemos todo tipo de orientación y consejería para combatir vicios que destruyen vidas, rechazamos conductas inapropiadas y buscamos una vida de santidad, pero cuando se trata de sentimientos como el enojo pocas veces somos precisos en el tema, a la vez no se espera que un cristiano se enoje pero tampoco se combate el tema en la iglesia, tal vez se piensa que simplemente al convertirse las personas dejaran de enojarse y listo, pero la realidad es completamente diferente, muchas personas están siendo afectadas por problemas de ira y no solamente ellas sino también a quienes le rodean.

Hoy muchas personas pueden estar sufriendo por condiciones de ira, especialmente por la crisis causada por la pandemia, el problema principal tal vez no es la falta de economía o la salud, sino que a causa de estos las personas están estresadas y lo reflejaran a través de la ira, así que muchas personas hoy necesitan un mensaje como este, un mensaje que los fortalezca o que les ayude a superar esas crisis emocionales en sus vidas.

Así que aprendamos tres cosas importantes el día de hoy.

Puedes enojarte

Esta sin duda es la mejor noticia del mundo, ¿Alguna vez alguien te ha reprochado que estés enojado? Es curioso, pero no nos gusta ver a los demás enojados, pero no tenemos problema cuando nosotros los enojados somos nosotros, el enojo es parte de nuestra naturaleza humana, desde pequeños expresamos enojo aun cuando no hemos aprendido el pecado.

Deje de reprimir en enojo y deje de reprimir el enojo en los demás, permita a los demás ser humano, el enojo en sí no es pecado ni hace daño, pero el enojo reprimido con el tiempo se convierte en amargura y la amargura si causará mucho daño, incluso hay médicos que afirman que muchas dolencias físicas son consecuencia de la ira reprimida.

Deje de negar la ira, reconocer su enojo le ayudará a canalizarlo correctamente no reconocerlo solamente hará que se confunda, muchas personas que están pasando por cuadros de crisis como la depresión cuando la analizan detenidamente se darán cuenta que en realidad están enojados

El mejor lugar para hablar de nuestro enojo es en la presencia de Dios, habla con él acerca de eso.

El apóstol Pablo dijo:

Si se enojan, no permitan que eso los haga pecar. El enojo no debe durarles todo el día, ni deben darle al diablo oportunidad de tentarlos. Efesios 4.26-27

El apóstol Pablo nos indica que tenemos permiso para enojarnos, pero hay reglas importantes que respetar, es como tener un gremlin debes seguir ciertas reglas para que no se te salga de control.

Primero no peques, el enojo y el pecado no son lo mismo, pero el enojo te puede llevar a cometer pecados, debes cuidar lo que dices y haces cuando estás enojado, no es fácil pensar sensatamente cuando estas enojado, pero puedes intentarlo así que pregúntate si lo que vas a decir es verdad, si va servir o dañar, si va a inspirar o destruir, si es necesario p no, si es amable o no lo es. Lamentablemente las peores acciones que recuerdo haber cometido han sido en un momento de enojo. No dejes que el enojo te lleve al pecado.

Segundo no dejes que el enojo te dure todo el día, otras versiones dicen no dejes que se ponga el sol, como a los gremlins no le puedes dar de comer después de la media noche así que tienes tiempo para tener el enojo, pero si tu enojo dura días o incluso semana o meses tienes un serio problema, debes tratar de controlarte, mientras transcurre el día, debes hacer algo que te ayude a bajar tu nivel de estrés, especialmente pide a Dios que te fortalezca.

Tercero no le abras la puerta al demonio, el enojo es un buen lugar donde el enemigo puede trabajar todo tipo de tentaciones y así tomar el control de tu vida con el tiempo el enojo se convertirá en una fortaleza cada vez más difícil de vencer.

Use su enojo correctamente

Entonces me enojé en gran manera cuando oí su clamor y estas palabras.  Nehemías 5.6

Como ya dijimos hubo muchos personajes en la biblia que se enojaron y algunos supieron dirigir su enojo correctamente, como fue el caso de Nehemías cuando vio que había problemas de acuerdos en la congregación, debemos entender el origen del enojo, en este caso no era motivado por el egoísmo, la venganza o injusticia contra su persona, sino estaba enojado con la injusticia de los grandes sobre los pequeños y la división de las personas, a veces lo mejor que puedes hacer como líder es enojarte.

Consecuencias del enojo descontrolado

«Tú y Aarón tomen la vara y reúnan a toda la comunidad. En presencia de todo el pueblo, háblale a la roca y de ella brotará agua. De la roca proveerás suficiente agua para satisfacer a toda la comunidad y a sus animales…  Luego él y Aarón mandaron a llamar al pueblo a reunirse frente a la roca. «¡Escuchen, ustedes rebeldes! —gritó—. ¿Acaso debemos sacarles agua de esta roca?».  Enseguida Moisés levantó su mano y golpeó la roca dos veces con la vara y el agua brotó a chorros. Así que toda la comunidad y sus animales bebieron hasta saciarse. Sin embargo, el Señor les dijo a Moisés y a Aarón: «¡Puesto que no confiaron lo suficiente en mí para demostrar mi santidad a los israelitas, ustedes no los llevarán a la tierra que les doy!». Por eso este lugar se conoce como las aguas de Meriba (que significa «discusión») porque allí el pueblo de Israel discutió con el Señor y él demostró su santidad entre ellos.

Por supuesto no todos los que se enojaron en la biblia fueron bien vistos, como fue el caso de Moisés que la biblia lo describe como el hombre mas manso de la tierra pero que en varias ocasiones lo vemos enojándose, por supuesto en algunas había una justificación por su celo por el Señor, pero en el caso de este pasaje no fue así porque su acción le trajo serias consecuencias.

Puedes comportarte de la mejor manera, pero de nada servirá si cuando te enojas pierdes el control y caes de la gracia del Señor. Todo un historial de buenas acciones en la vida de Moisés quedó opacado cuando no supo controlar su enojo.

Primero puso en duda el poder de Dios.

¿Acaso debemos sacarles agua de esta roca? Las palabras se interpretan de acuerdo al tono con el que las escuchamos, así que imagine de que forma el pueblo recibiría estas palabras de parte de Moisés, es por esa razón que Dios le dice:

Puesto que no confiaron lo suficiente en mí.

Pareciera que ellos eran los que habrían de hacer el milagro para la gente y no Dios. Además de que en un tiempo de crisis las personas deben recibir un mensaje de esperanza y de fe en Dios pero ellos trasmiten duda y pesimismo, nuestro mensaje en estos días debe ser de esperanza, debemos pararnos y que las personas al mirarnos pueda sentir fe y esperanza, pero si por el contrario somos portadores de duda e incredulidad Dios no se agradará de nosotros.

Segundo fueron desobedientes.

No le hablaron a la roca como Dios les había dicho, sino que la golpearon, Dios quería glorificarse ante un pueblo que no quería escuchar mostrando como una roca podía escuchar mejor que ellos, sin embargo, el furor del momento hizo que Moisés no se apegara a las indicaciones.

El resultado fue que no entraría a la tierra prometida, por su mal proceder, esto nos enseña que muchas personas exitosas no caen solo por pecados escandalosos sino por no haber conservado la integridad en un momento de crisis.

Dios puede ayudarte a controlar tu enojo

La realidad es que nadie quiere vivir preso del enojo.

No te apresures en tu espíritu a enojarte, Porque el enojo se anida en el seno de los necios. Eclesiastés 7.9

Me llama la atención como este versículo describe el enojo como un animal que se anida, en otras versiones dice que reposa, como si fuera algo que tiene vida.

Al igual que cualquier otro mal en nuestra vida debemos tener claro que Dios puede ayudarnos a vencer, todo se trata de a quien le damos el control de nuestra vida.

La biblia dice

“No permitan que el pecado controle la manera en que viven; no caigan ante los deseos pecaminosos. No dejen que ninguna parte de su cuerpo se convierta en un instrumento del mal para servir al pecado. En cambio, entréguense completamente a Dios, porque antes estaban muertos, pero ahora tienen una vida nueva. Así que usen todo su cuerpo como un instrumento para hacer lo que es correcto para la gloria de Dios”.   Romanos 6:12-13 (NTV)

Todos en algún momento hemos entregado el control de nuestra vida al enojo y hemos hecho lo que él nos ordenado. Es por eso que cuando nos convertimos le entregamos decimos que le entregamos el control de nuestras vidas al Señor, por supuesto esto es más fácil decirlo que hacerlo.

¿Qué debemos hacer para que sea Jesús quien tenga el control?

La primera acción en todas las conductas negativa que las personas desean cambiar en sus vidas siempre será reconocer que tienes un problema y que no puedes cambiarlo por tu propia cuenta. Esta es la parte más difícil porque la mayoría en este paso se bloqueará y negará tener un problema.

Lo segundo es pedir a Dios que te ayude a hacer los cambios en tu vida, pero como en todos los casos gran parte de ese cambio Dios no lo hará como si fuera magia, y un día simplemente dejaras de hacer aquello que no te agrada, sino mas bien actuará en tu vida a través de personas que te ayudaran a ser mejor cada día.

Habla con los demás de lo que estás tratando de cambiar en tu vida para comprometerte seriamente.

Y finalmente rinde a Jesús el control total de tu vida.